Partida Rol por web

Faustus se acerco lento, dejandole a ella hacer lo que queria con ese hombre que no gritaba de dolor por como apretabas sus huevos. Pero inmovilizado estaba. "Ya dejalo y ayudalo a levantar." comento haciendole un gesto para ello.

Los demas de la posada vieron esto pero no intervinieron mucho, algunas de las meseras vieron tambien riendose un poco por la situacion del hombre.

"En que estabamos? Ah si. Hablamos de mi prima...aunque tal vez no quieres hablarlo en publico." dijo el hombre entonces pidio una habitacion. "Vamos. Ikateria ayudalo a que nos acompañe." te dijo con una sonrisa complacida.

"No espera." dijo mirando de mala gana al sujeto pero mas a ti mientras se toma la entrepierna y ya lo notas que camina raro. "Maldita loca." dice por lo bajo pero le escuchas.

"Yo no tengo que ir a ningun lado contigo. Soy un guardia de tu prima y no trabajo para ti." dice tratando de imponerse resistirse como esperaba Fausto. "Respecto a ti eres una esclava. Mejor me respetas." comento dandose vuelta y usando su mano libre para tratar de empujarte lejos de él.

A Faustus lo ves suspirar y asintiendote a ti, como marcando que podias seguir accionando como querias hasta llevarlo a la habitacion.

Le dió un apretujón, antes de soltarlo como advertencia, pero conforme empezó a protestar ...

Yo no tengo que ir a ningun lado contigo. ...

Lo interrumpió con unos pocos golpes más, empezando por su magullada entrepierna, para ... motivarlo y amimarlo al lado de la colaboración ... sin esperar que dijera nada de esclava ni nada por el estilo. Estaba poniendo pegas al "amo" y sabía que no podía permitirlo. Además, podian encarnecerse al gusto, tanto que podría dejar libre, durante breves periodos de tiempo sus sentimientos, tanto un sadismo controlado, como la ira que la poseía ocasionamente como el odio a los hombres.

El permiso que Fausto le daba ya paso al permiso para "masajearle" otro poco las pelotas. Así que, sin soltarlo de los huevos, empezó con un codazo en las narices y un pisotón en la parte alta del pie, para que su calzado descendiera por la espiniña, como preludios al dolor que estaba por "disfrutar".

El guardia fue llevado a la habitacion de las bolas, eso habia quedado claro para los pocos que miraron el rostro de dolor de este, la forma de camina y como la mano de la hispana bajaba a ese lugar. Le costaba hablar con ello e incluso parecio agradecer cuando le pegaste haciendole salir sangre y luego el pisoton que le dio un dolor importante.

Cuando termino estaba en la habitacion golpeado.

"Ikateria dejalo ya..." dijo antes que fueras a morderlo. "Ya ves a lo que puede llegar aunque puede ser mucho peor." decia Feusto a lo que el guardia te miraba con miedo mientras se tomaba la nariz y huevos. "Ahora me serviras a mi. Dejas de darle importancia a mi prima y a su prometido. El cual si no te das cuenta se esta moviendo o no ves que se esta librando de algunos cuantos guardias?" pregunto aunque no espero su respuesta.

"Aca Ikateria te vigilara. Que obedescas, si es necesario a su palabra." comento mirando a la hispana con una sonrisa. "Dime como te trata Herius."

El guardia golpeado miro a ambos pero termino hablando por miedo. "Si, noto que retiran a ciertos guardias." acepto dejandote ver que habia un cambio de guardias.

"Herius es un sujeto violento. Aunque no como tu..." comenzo a decir mirandote y tratando de encontrar una deficinicion que no te altere. "guardiana?" dijo como preguntandote si estaba bien. "Es mas frio, suele liberar su ira con frialdad. Excepto contra la germana, no se porque se obseciona con ella pero la quiere para si." fue describiendo. "Los nuevos guardias no creo que sean leal a tu prima."

Cuando comentó lo de "guardiana?" asintió con un rostro frio, pero su mirada felina y depredadora lo escudrinaña y escrutaba como si esperase que hiciera algo más ... fuera de lugar. Aún así, esperaba a que hiciera algo a que Fausto le diera más instrucciones. 

El tipo estaba colaborando, así que, por ahora, no sería necesario "motivarlo" más.

Parecia que cualquier tipo de gesto de rebelion no llego, el guardia si bien miraba a mbos se concentraba en Faustos.

"Ya veo. Mi pobre primita se esta quedando sola y ustedes no hacen nada." comento este con decepcion. "Hablare con ella para que no permita que los sigan despidiendo. Que conserven el trabajo y que incluso se les pague mejor que a los otros." comento este como promesa y al guardia rapidamente le dio un par de monedas como si ya estuviera cumpliendo.

"No estan solos y por eso debemos hablar entre nosotros y sino aqui con Iketeria. Que tiene permiso de hablar conmigo si lo pide." dijo este y de paso la gladiadora notaba que tambien le habla a ella, recordandole que apesar de ser regalada seguia teniendo relacion con él.

"Que hay de Gallio como los trata?"

Tomo las monedas examinadolas un poco antes de guardarlas. "Gracias." dijo aun algo sorprendido por la oferta del hombre. Pareciendo estar mas docil ahora que le daba dinero.

"No le importamos en verdad. Deja todo en ordenes de Herius, no tenemos mucha relacion con este." respondio sin decir mucho pero tal vez no habia mas que decir.

Ahora, ya más calmada, estaba descubriendo cosas. Igual el "viejo señor" la ha llevado con sigo, a ver a su prima y como regalo, porque sabía que algo se estaba "mascando", en su contra. Se sentía orgullosa. Tendría que hablar con su amiga, con la que había viajado, juntas desde hispania.

- Además, necesito algo .... "más". Si la pillaba ahora por "banda", de haría "sudar" hasta que ella lo hiciera también. Icnluso tenía un "sueño húmedo" con la boticaria esa de egipto. Le llamaba mucho la atención eso de las serpientes que hacía, comosi las besara: - Yo beso mejor que esos gusanos venenosos. ..... - ¿Venenosos? Eso le dio que pensar. Había que ver que posibiidades había de envenenar a alguie, y de ver los tejemanejes de los lídres en el poder.

Aún estando más calmada, seguía mirando al soldado como si un gran felino viera su desayuno.

Asentía a las felicitaciones. Por su adentros, haría porque no lo olvidase. Una mueca sádica de felicidad afloró en la comisura del labio, como si hiciera el mayor de sus esfuerzos porque no fueran descubiertas sus intenciones de proporcionale más placer invertido.

Quedando ya a solas, negó con la cabeza. - No, dómine, preferiría regresar, ya que puede ser que se estén preocupando por vos. 

Le había gustado la "excursión". Había podido hacer sufrir, había dejado en livertad su sadismo y su ira, para un buen fin, y encima, gracias a ellos, había conseguido ser mejor vista. Pero aún así, una pequeña "pizca" de precaución también corría en su mente. Incluso era mejor que llegasen no mucho después que el guardia, para poder ... ver bien la situación, antes de que esta se pudiera tornar en su contra. - Los planes conta el señor, sin la vigilancia de este ... hervían más.

Asintió anets de tomar el camino, y mientras caminaba, comentó: - Sire, cuando el sonido se apague, vénga a buscarme, sin más armas que las que podamos usar, sin más intención que el verme a mi. Creo que el fuego vibra en los corazones, y lo mejor es estar cerca de los que más son y mejor manejan las armas ... o estar en otra casa. No era una advertencia, sino, una colaboración. Ya hacía días que se veía fraguarse una revuelta, una lucha, y estaba claro que los que mejor peleasen, serían los que tendrían las que ganar, y esos eran ellos. - Para luchar entrenamos, para librarnos del yugo pelearemos.

Faustos te miro por un momento escuchando tus palabras. Si era una colaboracion o advertencia no lo supo pero viste que tenias su atension en ese momento.

"Pase lo que pase tratare de ir contigo con mi hermana. Pero si por alguna razon no llegamos tendras que buscarnos, pero no confies en herius ni en gallio." le informo algo que parecia obvio pero merecia la pena decir. Con ello siguieron su camino y tras llegara se separaron en el ludus.