Ella tambien transpiraba y mas de que habia empezado a embestirla, sus pechos rebotaban incotrolables mientras su cuerpo que bien podia ser fragil aguantaba como podia las embestidas del galo. Ella gemia con fuerza y mas fuerza sin importarle quien la escuchara en ese ludus.
No habia pensamiento en su mente mas el de disfrutar de esa locura que le habia hecho conocer el galo. De cualquier forma entendio lo que pretencia este cuando metio sus dedos en la boca y los succiono sintiendose su lengua, aunque tambien sus dientes de vez en cuando con cada chote de este a sus caderas.
No parecia que iria a flanquear, con sus ojos yendo al hombre y comunicandole sus ansias junto su incansable lascividad. Pero poco podia decir los dedos de èl en su boca.
De todas las mujeres con las que el se acostó, Camilia demosrraba ser la más resistente, literalmente es ella la que más estaba soportando la toda su fuerza y peso de un hombre del doble de su tamaño cuyas labores en su vida an sido complacer, tanto en la arena cómo en los eventos especiales.
Sacó sus dedos de la boca y volvió presionar sus pechos con ambas manos, apretando la prominencia de sus puntas rojo oscuro, si llegaba a acelerar más el ritmo, podría lesionarla, ya con esta frecuencia era posible que se notara algo en el caminar de la lanista.
Eso no importaba mucho ahora, estaba saboreando el calor de su cuerpo con locura, al, y de forma inconciente se acercó a su boca, para darle un morreo bien lascivo, y ver la cara de ramera que esta ponía.
Camilia resistia por ahora la ferocidad de de Duilius, aunque sin duda el mañana no le traeria un buen dia. Con algunos moretones y algunos dolores. Pero ahora con la excitación que tenia en la piel mucho de lo que hacia el galo le daba mas placer que dolor.
Sin pechos se podia imaginar que quedarian marcados con las manos fueretes del galo pero mientras ella sejaba sus propias marcas en su espalda con su uñas que no se quedaban en un solo lugar sino que bajaban como podian por la espalda del hombre.
Entre los gemidos de ella, lo vio acercarse y acepto su beso que acallo un poco mas facil a la domina mientras esta dejaba sentir en ese beso largo lo bien que se sentia. Su rostro siendo claro de placer y como una ramera. Una ramera que volvia venir en el miembro de este y que empapaba esa cama que tanto esfuerzo hacia.
Estaba generando bastante presión sobre su falo, una presión que lo acercó fuertemente al climax, a medida que esto se hacia presente, apartaba las manos de las tetas para llevarlas a la parte posterior de los muslos, justo detras de las rodillas.
La lanista alcanzó su punto de culminación antes que e,l pero no dejó de sujetarle, cómo si su cuerpo clamara por su semilla, clamara por ser impregnada, cosa que cumpliría guatoso.
Arremetió una ultima vez en ella, tan fuerte que pareció que la cama se iba a quebrar, quedando bien adentro mientras su simiente comenzaba salir.
Su cuerpo se tensa con la intensidad de su propio orgasmo, dejando que el tiempo pase, al menos uno doce segundoa pasaron , saco su miembro de adentro, que mostraba un poco de flaqueza.
-Mi domina parece complacida... ¿Pero realmente lo está?
Preguntó Duilius a la mujer.
La mujer se quedo ahi pegada a èl, hasta que lo sintio undirse una vez mas contodo, haciendole dar un gemido largo mientras su semilla se introducia dentro de ella. Cuando este se aparto ella se dejo caer rendida a la cama, con un rostro de satisfaccion.
“Lo estoy y mucho.” comento buscando su mirada y con su mano tratando de acercarse al rostro de este. Aunque estaba cansada. “Haces muy bien esto galo. Tienes un don.”
“Espero que en la fiesta tambien cumplas. Seguro habra mucha diversion ahi.” comento ella sonriendo, bajando su mano y acomodandose como podia en la cama.
Se acercó a su rostro para escuchar aquellas palabras, mantenía la apariencia pero no le agradaba lo que había escuchado, el galo sentía dudas con respecto a aquello, de hecho siempre solia mostrarse reacio a las fiestas o demostraciones, y más cuándo estas incluyen algo de esas necesidades, sin embargo pudo mantenerse calmado ante la afirmación de la lanista.
-Si no es mucha molestia que pregunte, que a planeado para mi?
Sonrió cómplice, pero mantenía la cautela mientras hablaba cerca de ella, casi pegado a sus labios carmesí.
Ella se quedo en la cama con los ojos cerrados hasta que lo sintio tan cerca arriba de ella. “Eres muy curioso.” comento ella divertida. Aunque cuando lo vio no retirarse, siguio hablando. “Planeo que controles lo que pasa en la fiesta. No es que dude de tus enseñanzas pero no confio del todo en las gladiadoras. Mas con hombres presentes.” comento con algo mas de seriedad. “Aunque es probable que las cosas no salgan como planiemos, no se si sera tan ordenado con ellas.” le explico o tal vez preparo.
“No creo que dañen a alguien, pero les costara quedarse quietas. Aunque tal vez nos ayuda, no quiero que esta fiesta sea aburrida.” comento tocando su rostro antes de ponerse de costado desviando de los labios del galo. "Necesitamos que esta fiesta sea recordada."
La fiesta será recordada domina, las partes quedarán complacidas, y usted se sentirá honrada por los frutos cosechados
Dijo a oidos de la mujer, se sentía un dios en ese estado, se irguió para levantarse y salir de lq cama, pero lo cierto era que cuándo volvió a ver el cuerpo deanudo de la lanista, su erección apareció de nuevo.
Se sentía cómo un adolecente insaciable que no podía parar hasta estar satisfecho, y una satisfacción que podía tardar horas en llegar.
Se introdujo en ella por tercera vez, se sentia tan exaltado que no podía detener sua reqccionea biologicas, sabía bien que la mujer le perdonaría tal intrusión a su cuerpo.
Disculpas domina, pero su ser es una tentación incontrolable para mi.
De esa forma, comenzó ancogerla una vez más.
Perdón, creí que habia respondido.
La lanista parecio estar apunto de dormir cuando lo vio yendose, pero entonces sintio que la cama volvia a deformarse tratando de aguantar el peso del galo. Ella abrio los ojos un poco antes de ser perforada, dando un grito de gusto pero ningun reclamo.
Asi siguieron mas tiempo esa noche con la mujer dejandose tomar lo que pudiera aguantar su cuerpo antes de desmayarse en los brazos del galo. Estuvieron un buen tiempo sin mas preocupaciones ignorando cualquier problema. Cuando terminaron ella quedo con una sonrisa de satisfaccion que haria orgullecer a cualquiera.
El galo mientras la miro pero sabia quedebia irse, como consuelo le quedaba ese momento y la mañana siguiente cuando la vio aun cansada y moviendose raro. Algo de èl quedaba en ella, tal vez una adiccion.
Escena terminada.