Las palabras, actitud y actos del oráculo egipcio sólo consiguen que el enojo del japonés se haga más evidente en su rostro, aún incluso después de la intervención de su compañera en su favor, la actuación exagerada de Khamsa o de las palabras del Cocodrilo pidiendo calma. Y transparencia.
Se encamina hacia él para cortarle el paso, para obligar al apodado León a mirarle a los ojos y a escucharle.
¿Tan grande es tu orgullo que te impide ver la diferencia? En cuanto han tenido la oportunidad ellos han preguntado si podían ver nuestras esferas y que nos la dirían en privado. Tú, en cambio -mientras habla sus músculos al descubierto se tensan y parecen crecer, dándole un aspecto más amenazador, aunque no parece ser consciente de ello-, en cuanto has tenido la oportunidad has hablado de una mujer que no conozco para demostrar que tienes poder y la razón y has dicho que conoces mi Nombre Verdadero. Porque claro, en las nieblas con eso podían jugar contigo como si fueses una marioneta ¿pero no es una amenaza? ¡JA! -incluso emite un ligero gruñido- Tan grande es tu orgullo que en vez de enfrentar la verdad quieres huir. Además ¿Cuándo he dicho yo que no sepa cuál es mi nombre?
Bufa y respira agitado.
Me has decepcionado. Creí que eras otro tipo de persona, pero está claro que el egoísmo lo llevas en los genes.
Se gira entonces hacia la oráculo pelirroja y aguarda un par de segundos antes de abrir la boca. Aunque el enojo es patente, parece sensiblemente más comedida.
¿Y si querías saber sobre tu amor, por qué no preguntas por ella en lugar de por mí? ¿Por qué no me preguntáis si quiero que preguntéis cosas sobre mí? ¿Por qué no me preguntas si sé algo sobre Kled? ¿Es que os doy maldito miedo? ¿Os hace sentir poderosos poder indagar sobre los demás a sus espaldas? ¿O es que lo que temes es la verdad? Porque de veras, no se me ocurre cómo una pregunta sobre otra persona o su relación conmigo te iba a dar esa información.
Con un pisotón, de rabia contenida, una de las ramas del suelo cede y se rompe, levantando arena cerca de ambos. De reojo observa a Tau, pero ni se digna en hablarle directamente.
Aquí algunos tienen el poder de convertir vuestros cuerpos en un amasijo informe sin vida. ¿Y veis que lo hagan? No ¿Por qué? Por respeto. Por honor. Porque no necesitan preguntar si queréis ser unos cadáveres nada bonitos. Vosotros, sin embargo, hacéis lo que os viene en gana sin importar nada.
Y aún así, queréis obediencia ciega.
Casi tendríais que dar gracias porque nadie haya perdido la cabeza y os haya partido la cara.
Se aleja un par de pasos de los demás y su mirada se clava en Cocodrilo y con resignación pone los ojos en blanco.
Lo siento si os ha ofendido, pero me han pedido que sea transparente y ya que parece que no hacéis caso a las palabras suaves, quizá una honestidad brutal os haga ver las cosas.
Ese lo siento sonaba más casi a una cordial obligación que a algo realmente sentido.
Al escuchar la explicación de Kazán, Hallie se quedó pensativa tratando de comprender lo que este le decía – Oh… Bueno, creí haber mencionado que era una idea que teníamos, nada de certezas ni órdenes. Además, no pedí obediencia ciega, solo indicamos las posiciones que creíamos eran correctas – se veía en la necesidad de explicarse. Después de todo, ella era la que había hablado a nombre de los oráculos -. Si es el caso, acepto entonces mi responsabilidad de haber transmitido el mensaje de manera autoritaria sin buscarlo. Aunque creo que aquí hay más que solo ese malentendido – miraba alrededor las discusiones y cómo el hijo de Zeus y el oráculo de la vida parecían empezar a discutir fervientemente.
Observó también a Noctulica, quien cambiaba de forma a una más humana, aunque no comprendía del todo por qué. Empezó a escuchar la historia que contaba la recién despierta diosa sobre cómo fueron erradicados sus creyentes por lo cual se vio obligada a vivir como humana, y toda la masacre de su pueblo – Puedo comprender en parte tu dolor. Claro que es diferente para las criaturas que para los dioses, por más hijos de los dioses que seamos – dijo como comentario aislado, aunque de seguro para ella era importante aclararlo.
- Si quieres que te llamen Avgi, te llamaré Avgi. Pero el destino no da espera – y miró a Nero un momento -. Tal vez sea esa falta de experiencia para sentir las energías universales lo que ha nublado tu juicio e hizo que el miedo se apoderara de ti. ¿O acaso dirás que aquella burbuja en el centro de los mares no va a contracorriente? Lo divino siempre sobrepasa a lo natural, así que por más que hubiera un cambio, la energía que había era divina. El ritual fue arropado por Selene, quien brilló desde el cielo con intensidad – se quedó junto a Avgi, pero miró a Khamsa mientras mencionaba una historia que hizo que la dragona ladeara la cabeza.
- Kallisti… - mas no dijo más, mientras miraba las pantomimas de la rubia. Era una chica extraña, pero al menos conocía sus tradiciones. Eso la halagaba. Extraña como cierto hijo de Zeus, a quien se giró cuando pareció estallar en rabia, mas se giró a la capitana -. Tal vez habría sido de ayuda que dijera todo eso primero, en vez todo lo demás – no había agresividad en su voz, tampoco enojo. De hecho, su expresión era completamente neutral al decir eso.
Se giró hacia Nero de nuevo – Todo ritual debe tener un balance perfecto de energía. Ningún extremo puede sobrepasar al otro o las partes podrían sufrir con este. Si son dos diosas y dos semidioses con un lazo, tenían que estar equilibrados a su vez. Por eso Cedric estaba al norte y Masud al sur. Así como Brynja hacia el oriente y Avgi hacia el occidente. Las posiciones que tomaron concuerdan con aquellas de las estatuas que les representan. Es decir que los puntos cardinales de ambos lugares son compatibles – respondió la dragona con tranquilidad.
Por fin miró a Kazán cuando este terminó de decir lo que quería decir. No lo miró con reproche, pero le habló con tacto y un ritmo suave, casi como si de su madre se tratara -. Tu enojo es comprensible, pues se trata de un bien preciado, pero ¿el problema era la malintención? Si lo era, aclararon que no era el caso, aunque tú más que cualquiera debería comprender la diferencia de las palabras entre unos y otros, más por ser de nuestro panteón con crianza de otro. Eso debería darte más visión y tolerancia, no más armas a tomar en cuenta. Si es gritar lo que te consuela, grita. Pero seguramente solo te dolerá la garganta – y no dijo más. Se quedó en silencio acompañando a Avgi, casi como si buscara protegerla o acobijarla. Después de todo, era de su familia.
Alina miró el dibujo de Brynja con sorpresa. Si bien no había querido seguir discutiendo, sí que quería saber la distribución de los puntos. Solo comentó – Todos sufrieron transformaciones cuando entraron en el trance y una enorme corriente de aire los rodeó. Cuando se estabilizó, el dibujo en la arena que habíamos hecho cambió a ese que estás representando ahora. Tratábamos de ubicarlos a todos para ayudarles a canalizar el ritual, pero al no creer en lo que les dijimos y hablarnos como lo han visto, se desató la discusión – explicó sin ganas. Estaba enferma, hastiada.
Miró un momento a Masud pasando de Hikari y Neo, aunque claramente eso iba para sus comentarios también – Nunca fue nuestra intención que fuera secreta, solo que teníamos las manos llenas intentando sobrevivir. Apenas estábamos revelando todo lo que sabíamos, Michi nos arrastró por la línea ley hasta esta isla para reunirnos con ustedes, así que cualquier cosa que estuviéramos compartiendo, fue opacada por su llegada – cosa que a la pelirroja no le sentó bien, pero no podía culparlos.
Las palabras de Cedric le dejaron un sabor amargo. No dijo nada, solo evitó la mirada. Estaba cansada de tratar de hacer lo que consideraba correcto por quienes consideraba que solo pensaban en sí mismos. Miró a Kazán primero, escuchando sus pensamientos, notando que cierta parte de lo que le dijo había llegado a él -. La explicación es sencilla, pero no hubo siquiera tiempo de hablarlo, ni de disculparse. Tampoco te haré las preguntas ahora porque ni tú ni yo estamos en disposición de escuchar, pero si quieres saber lo que vimos, te lo diré sin problemas –.
Miró a Alondra de nuevo fastidiada – Oye, ya te lo dije. No me interesa manejar a nadie, pero es como se ve, pues las estatuas de los oráculos son más grandes que las demás. Son los pilares exteriores del ritual, así como los cuatro que acaban de despertar son los interiores del suyo. “Dominio” es la palabra que usamos para mencionar que cada estatua posee un elemento que representa su linaje y naturaleza. Así como tu estatua refleja la quimera que mencionaste ser – y cuando Masud les insistió que pelearan, Alina solo asintió a lo dicho por Alondra. Con las condiciones pactadas, solo quedaba empezar -. Claro, porque has llegado al barco a abrazarnos a todos, ¿verdad? – y dejó sus espadas en el suelo, mas conservó su mochila. Eso sí, dejando el pequeño huevo junto a estas con delicadeza. Buscó dos palos que asemejaran en peso a sus espadas y dejó uno cerca como refuerzo.
- Mi honor como nórdica me impide echarme para atrás, así que adelante – y miró segura con los ojos brillantes a la pelirroja. Sus felinos iris brillaban con expectativa y algo de emoción entre todo.
En otras circunstancias Tau se habría hasta reído de las formas de Khamsa expresaba a su peculiar manera la frase “quien esté libre de pecado que tire la primera piedra” para luego acosar a Avgi a preguntas lo cual hizo que suavizara levemente el gesto de indiferencia haciendo que mis facciones fueran menos duras.
Tras esto mi gesto se endureció de nuevo cuando observé como Alina aceptaba el reto poniendo las condiciones, aunque Masud había sido el que había exigido que esta disputa se resolviera ahora mismo, pese a que gradecía la defensa de Alina ante Kazán.
Los comentarios de Brynja hicieron que mi rostro se volviese pétreo mientras apretaba los labios observaba el dibujo proporcionado por Brynja.
---Puede ser útil, aunque por mi parte necesito reflexionar sobre ello- digo con tono neutro- quizás comparando ambos dibujos encontremos algo.
Por otro lado ignoré los comentarios de Hikari quedándome con lo justo y necesario, había tenido suficiente de ella, por lo menos en el día. Mientras tanto el pobre Cedric trataba de reunir los pedazos del lio que se había montado en su breve ausencia, pero de igual manera no quise decir nada, estaba demasiado cansado para seguir peleando ya.
Afortunadamente la intervención a mi favor de Masud hizo que se mi gesto se enterneciera un rato mientras lo miraba, aunque enseguida se endurece y vuelve a mirarla.
---Sí más gente se involucra y nos ayuda a escoger preguntas y a interpretar los resultados, no tendremos en absoluto ningún problema en ser más comunicativos- digo haciendo un gesto abarcando toda la playa- Sí vamos a revelar todas nuestras acciones a cambio queremos que sea reciproco y obtengamos una contestación y no solo hablar a una pared….
Cuando Kazán se me acerca no aparto la mirada, aunque la frialdad seguía siendo pactante, aunque la actitud ya no parecía más hostil que antes, así que escuché todo lo que me dijo, lo cual era amargo en gran medida.
--- Quiero dejar claro- empiezo a decir con frialdad a Kazán aunque sin un ápice de hostilidad ni resentimiento- Que nunca he querido ni amenazarte, ni coaccionarte ni hacer nada que suponga un mal ni para ti ni para nadie del grupo ,nunca- aclaro con rotundidad antes de añadir- Siento que para ti esto parezca una falta de respeto, honor o lo que quieras añadirle pero hice lo que creí mejor para todos en aquel momento y prefiero que me odies por haberte hecho algún bien que callármelo y no ayudarte en algo que pueda resultarte trascendental, mis intenciones nunca han sido ni serán maliciosas.
Le contemplé fijamente sin apartar la mirada mientras decía estas palabras, podría haber respondido mucho más borde e incluso de manera ácida como hice con Hikari pero eran dos asuntos distintos completamente, así que esperé una contestación por parte de Kazán antes de retirarme.
---Estoy cansado, así que yo también me retiro sí os parece bien a todos- digo mirando al grupo, en otras circunstancias me hubiera marchado sin pedirlo, pero dadas las circunstancias.
Me iba dejar caer sentado pero la situación seguía siendo como era por supuesto. Respondo a la sonrisa de Avgi con otra similar y dejo que sacie la curiosidad de la rubia sin intervenir. La primera parte de la historia al fin y al cabo la sabía y los detalles eran algo personal que no cambiaban el relato. Dioses matando a dioses... nada nuevo, nada viejo.
Por otro lado Masud había decidido aplicar su lógica de si se hostian se calman con las dos mujeres, una solución tan buena como otra cualquiera y además su decisión, nada que discutir.
Sin embargo lo que me llama la atención es todo lo que suelta Kazan a meros pasos de Tau y la respuesta por una vez comedida del egipcio.
- Kazán, conmigo.- le hago un gesto que casi suena a orden, así que suavizo el tono.- Te lo pido como compañero de viaje pero creo que tenemos cosas que hablar. Lo mismo para vosotras dos.- añado a las pelirrojas.- Primero cumplid con la orden del jefe de exploración, pero me gustaría hablar con ambas por separado antes de mañana. Luego ya os dejare dormir en paz.
Khamsa escucha atentamente la respuesta de la diosa que ha recuperado su autoconsciencia.
Fenicios... - Repite en algún momento del discurso de Noctiluca con un brillo extraño en la mirada.
Entonces, cuando acaba su discurso, se deja caer al suelo de rodillas, justo delante de ella y comienza a dibujar algo en la arena.
Noctíluca, ¿reconoces esto? ¿esta escritura?.... - Lo miró con aquel dato en mente mientras repetía una y otra vez - Emparentados con los que borraron, emparentados con los que borraron, emparentados con los que borraron... ¿Has dicho fenicios? Mesopotamia...
Entonces ladeó la cabeza y miró aquellos trazos con aquella idea en mente hasta que acabó encontrando cierto nexo con algo que reconocía. Debajo del sexto pictograma dibujo algo.
El caso es que... ¿Es posible? ¿Cómo no había caído antes?
Levantó la mirada a la diosa y le hizo una pregunta
¿Puede ser algo evolucionado desde el Hierático?
Pero el "escenario A" no había frenado en su intensidad, todo lo contrario. De hecho, cuando levantó la mirada, descubrió que era la única que quedaba atenta al "escenario B".
Se levantó y se sacudió la arena de la ropa mirando hacia el grupo que, cada vez era menos grupo.
Alzó la voz para que todos la oyeran.
¡¿Pero se puede saber qué os pasa?!
Les miró a todos con incredulidad.
Estamos más cerca que nunca de saber algo sobre la realidad de lo que está sucediendo. Tanto a nivel personal como a nivel grupal. Hace menos de 4 meses estábamos escondiéndonos de unas criaturas que nos quieren dar caza e intentando reagruparnos para poder hacerles frente. Hoy tenemos un rastro. Tenemos algo. Tenemos unas visiones que interpretar - dijo señalando con los brazos a alguno de los oráculos -, tenemos personas poderosas y muy antiguas que arrojan luz sobre lo que sucede - señaló a Noctíluca, ya que la tenía justo al lado -, hemos perdido a muchos, pero también los que quedamos hemos crecido mucho. Tenemos nuestros propios poderes que han crecido y nos permiten entender aunque solo sea una mínima parte de lo que ocurre - señala a Hikari -. Ahora incluso tenemos al alcance de nuestra mano una llave. Una llave que lleva a una respuesta. Una respuesta que nace de vuestras visiones, pero también de lo que acaba de suceder. - Señala a Brynja y el círculo que acababa de dibujar - Tenemos pistas. Por primera vez los que no tenemos acceso a información por nosotros mismos tenemos las respuestas de los que sí tienen acceso. Los oráculos están entre nosotros. Los dioses están entre nosotros. ¡Contamos hasta con la colaboración de una de las criaturas más antiguas y sabias que existen!
¿Queréis saber qué veo yo mientras vosotros discutís? Veo respuestas. ¿Incompletas? Sí. ¿Crípticas? Sí. ¿Confusas? ¡Sí! ¡Nadie dijo que fuera fácil! ¡¡Nunca lo ha sido, por el amor de Dios!! Hace tan solo 10 minutos estábamos despidiendo a todos aquellos que hemos perdido y nos recuerdan lo difícil que es.
Quizás no todos lo veáis igual, pero para bien o para mal, algunos seguimos aquí pese a haber sufrido hasta cinco ataques. Hace un año nuestra vida era en comparación sencilla. Pero ninguno hemos elegido vivir aquí y ahora. No es una elección. Nadie nos ha preguntado ni nos ha permitido responder. Solo estamos. Y estamos luchando por nuestra propia vida, pero también por la de los demás. Nadie nos ha preguntado, pero aquí estamos. Y estamos porque no tenemos otra opción.
Se giró hacia Masud
¡Tú! Para que un combate resuelva las diferencias, tiene que haber un contexto previo. Un acuerdo sincero en el que ese combate resolverá algo o una relación previa que el combate pueda restaurar. Que dos personas que recién se han conocido se pongan a combatir porque discrepan no va a resolver absolutamente nada.
Se giró hacia Tau
¡Tú! No puedes huir. Esto es más grande que tú o que cualquiera. Te perseguirá y te dará muerte. Y no solo a ti. También perseguirá y dará muerte a todos a los que quieres. No-puedes-huir.
Se giró hacia Hikari
¡Tú! Estás en la misma arena que todos nosotros. No estás en un pedestal. No tienes más perspectiva. No estás sola ni lo estarás nunca mientras esto continúe. No sé que te ocurrirá en tu tierra natal, pero sí sé que lo que ocurre es más grande que tu tierra, que tú misma. ¿Nadie te ha enseñado lo que significa la palabra familia? Pues ve poniéndolo en práctica. La familia no se elige. No se puede elegir. Y esta, nos guste o no, es nuestra familia.
Se giró hacia Kazan
¡Tú! Si no confías en los demás acabarás muerto. Acabarás muerto tú y probablemente todos nosotros. Si tienes algo que aportar, empieza a hacerlo de manera constructiva, porque no nos podemos permitir más destrucción.
Se giró hacia Alondra
¡Tú! ¿Por qué sigues aquí? Decídete de una vez. Si vas a quedarte, empieza a pensar como convertirte en una más. Si pretendes continuar así, al menos no molestes.
Se giró hacia Cedric
¡Tú!... perdón, quiero decir... Por mi parte puedes acceder a mi esfera sin problema, pero con una única condición: Quiero que absolutamente todos aquí sepan lo que tenga en su interior. ¿Qué si tengo secretos en mi pasado? ¡Por supuesto! Mi pasado es mío y no lo he compartido con ninguno de los que están aquí. Con ninguno. Pero ya va siendo hora de que eso cambie. Si que accedáis a mis más profundos secretos es el precio a pagar para poder averiguar como detener todo esto, ¡Sea! ¡Estoy más que dispuesta!.
Y por último enlazó lo anterior con una nueva conversación dirigida a todos.
¿Y vosotros? Empezad a plantearos qué narices dentro de vosotros mismos, vuestros orgullos y vuestros egos es más importante que esta maldita historia.
Tras meditar y haciendo un exquisito uso de la habilidad de "Escuchar solo lo que le parece digno de mención", Hikari asiente a Nero - Tienes razón. En comparación este esquema parece estructurado, mientras que el otro evoca... una energía mucho más caótica.
En cualquier caso nos falta información para lograr hoy más certezas. - En algún momento alguien la acusó de no haber compartido lo que sabía antes, lo cual tenía su gracia ya que aquella era la primera vez que veía aquellas disposiciones. Definitivamente, otro comentario fuera de lugar que no merecía respuesta. Tanto como las acusaciones de haber roto un árbol que no podría importarla menos o la de ser ella misma junto a ser "culpable de todo lo malo" que pudiese pasar tras una sugerencia. Si aquellas cosas le llegaron a hacer mella de alguna clase, no dio muestras de ello. Sin duda, estaba concentrada en cosas mucho más valiosas.
Sonríe a la herrera, ahora con aspecto mucho más mundano aunque indudablemente hermosa - Protegida de Egipto y enlazada con la mar. Es una hipótesis interesante. No la descartemos, Avgi-san - Retomando el uso de su anterior nombre, aquel con el que había nacido en aquella vida automáticamente y sin más escándalos, aceptando así su petición. Una breve mirada a Hallie brilla con cierto escepticismo. Había algo que no encajaba, pero tendría tiempo de sobra para resolver sus dudas, como siempre. - No tengas tanta prisa en despreciar la percepción de otro sobre energías que no comprendes del todo. - Y decir "no comprender del todo" era ser generosos, más cuando la criatura se empeñaba en quitar credibilidad al hijo de los mares.
Hikari podía ser muchas cosas, pero sin duda no era alguien que disfrutara de la violencia. Si bien sí que una leve sonrisa asomó de sus labios por el "castigo" que Masud les imponía - No temas. Les tomaré la palabra a ambos Masud-san y Tau-san. Hasta ahora me había mantenido distante para que no se sintieran dirigidos, pero mañana presentaré una lista de preguntas que me gustaría que fuesen formuladas. En el orden que estimen oportuno, por supuesto. Estoy segura de que más personas se animarán a hacer lo mismo poco a poco.
Finalmente se fija en los dibujos de Khamsa. Ella tampoco había perdido detalle de las palabras de Avgi. Ya había visto antes el símbolo en la arena, y estaba a punto de añadir una pregunta a la recién despertada diosa, cuando la egipcia estalla, lo cual primero la intrigó, y unos momentos más tarde la ayudó a descubrir estaba cansada. Abrumadoramente cansada.
- Nos das demasiadas cosas en las que pensar al mismo tiempo, hija de Seth. Eso no es justo, ya que tu energía es inconsumible a estas horas y el resto estamos agotados.
Si no te importa, creo que deberíamos dejar esas valiosas indagaciones para mañana - Mira a Avgi - O quizás pasado mañana. Es una lástima que no te quedes con nosotros en el barco. Me hubiese encantado conversar de todas estas cosas y conocer un poco más la historia de tu pueblo.
Espero que me prometas que tendremos ocasión.
Masud tenía muchas costumbres aprendidas. Puede que como síntoma de una mente simple, ciertas cosas se aprendían y se repetían quitando peso a decisiones nuevas. ¿Puede que muchos lo hubiesen votado por su simpleza? Pero lo habían votado, lo que le había obligado a tomar ciertas decisiones difíciles a sabiendas de que algunas cosas podían pasar.
Aunque asintió al ver la aparente victoria de su intento de mediación para que los oráculos, o al menos uno de ellos, se ofreciera a ser más abierto y aceptar sugerencias exteriores y por otro algo el resto, o al menos una, se comprometiera a apoyarlos en su trabajo para que no les supusiera tanto esfuerzo, no sonrió.
No estaba tranquilo. Faltaban cosas por resolverse.
Y cuando Khamsa le dijo que no le gustaba lo de las peleas... apretó los dientes.
Masud era un hombre de costumbres. No recordaba ni una sola vez que le hubiese negado algo a Jezabel, a la que seguía viendo en Khamsa. Ni una sola vez... - No - Negó poniendo más esfuerzo en ese gesto estúpido de lo que probablemente nadie, salvo aquella a la que se dirigía, pudiese imaginar. Se acerca a ella y pone las manos en sus hombros con la mandíbula tensa. - Esta vez... haremos esto a mi modo. Que también es el de ellas. Pudieron resolverlo de otra forma y no han querido. Ahora toca esto.
Y... por cierto. Las esferas no desvelas secretos. Solo es una escena cada una. sin caras ni palabras. como una escena de infancia o algo así - termina encogiéndose de hombros - Y ninguna esfera es más grande que otra - Aclara
Al girarse al grupo busca momentáneamente con la mirada a Tau y a Brynja, pero un momento después se obliga a fijarse en todo el grupo - Quien no quiera verlo no está obligado a hacerlo. Ya veo a Haakón acercándose en su barca.
Quien quiera ir a descansar al barco no tiene más que reunirse con él. Quien vaya a quedarse en la playa que no se aleje de donde pueda verle. No sabemos qué hay más allá. Yo arbitraré la pelea - No se fiaba ni medio pelo de que se respetaran los límites si ambas pactaban usar todos los recursos mágicos de los que disponían. Y aunque tenía a Alina en estima, no sabía si la contraria se detendría cuando debiese hacerse. Simplemente, no la conocía.
- ¿Preparadas? - Preguntó a la una y a la otra cuando las vio listas en uno de los lados despejados. Levanta un brazo y lo baja de golpe dando así la señal de inicio - [¡luchad con valor!] - Grita del modo que había visto hacer a los asgardianos en la arena docenas de veces. Probablemente la única expresión en ese idioma que sabía pronunciar, aunque no tenía ni idea de cual es era su traducción literal
Cada uno de los supervivientes en torno a la hoguera tenía sus fortalezas y flaquezas, sus percepciones y opiniones. Lo que para unos era correcto, para otro no lo era. ¿Quién puede tener razón? Probablemente todos. Y a la vez ninguno.
Para resolver aquella disputa se ha escogido un juicio de batalla. Una forma violenta que encuentra un reflejo sólido en las normas de la tierra que pisan.
Las cosas se resuelven. Dejar que se estancasen sería una estupidez. Una mirada de advertencia del líder de expedición es más que suficiente para recordar a todos que nadie debía interponerse.
En el aire flota alguna clase de solemnidad que inconscientemente pareció acallar las conversaciones que aún pervivían. O puede que simplemente entre ellas todo lo que pasaba fuera acabase de perder importancia, concentradas la una en los movimientos de la otra.
Los movimientos de Alina son suaves y elásticos, mientras que Alondra mantiene una pose fiera y decidida.
Nada más dar la señal para empezar un frasco apareció en la mano de Alina. Un tesoro que ya había usado en las arenas de Asgard. Lo arroja a la contraria, pero ésta demuestra ser más rápida de lo que parecía y logra apartarse de la trayectoria lo suficiente como para que solo la salpiquen unas gotas de refilón. Indudablemente, insuficiente para detenerla.
Con un ímpetu arrollador la recién despertada ataca, y aunque en el último momento el cuerpo de Alina se cubre de una luz dorada y envolvente que parece provenir del centro de su cuerpo disminuyendo la efectividad del ataque, no es capaz de mitigar lo suficiente la fuerza del golpe. Si fuesen espadas, el tajo sería indudablemente profundo. Otros dos golpes como ese y sin duda ya no podría ni levantarse.
La siguiente maniobra de Alina podría parecer extraña a ojos inexpertos, pero más de uno reconocería cómo con la zurda lo que intentaba golpear ahora no era a su contrincante, sino al arma que portaba. Quería desarmarla. Pero una maniobra tan arriesgada se encuentra con una oposición férrea de su contrincante. No solo no consigue su objetivo, sino que pierde pie en la arena y se cae de bruces. Su capacidad para ver venir los golpes la advierte apenas a tiempo para cambiar de postura, pero aún así la patada en los riñones escuece, incluso a través del escudo dorado.
Logra levantarse dibujando con sus armas improvisadas un arco que esta vez sí da de lleno... pero no consigue ningún efecto. Como si el ímpetu de batalla que la más fiera enarbolaba le sirviese de arma y escudo al mismo tiempo.
La poción no había acertado. las maniobras arriesgadas eran demasiado complejas contra aquella contrincante. Alina empezaba a sentir que era superada en habilidad, pero no por ello da su brazo a torcer.
Aumentando la velocidad del intercambio de golpes, los siguientes segundos son vertiginosos, pero mientras la joven empezaba a acumular más y más magulladuras, la contraria permanecía intacta. ¿Es que esa maldita Alondra no tenía ningún punto débil?
Tras su último golpe, Alondra da un paso atrás. Las heridas de su enemiga aún no eran lo bastante graves como para que su habilidad como luchadora se resintiera, pero estaba a nada de un resultado atroz.
- Te ofrezco la rendición. - Dice ésta con seriedad.
Alina aprieta los dientes. Sí, estaba siendo superada, pero su orgullo de nórdica no le permitía hincar la rodilla tan pronto. No, mientras sintiera que aún podía seguir luchando.
El juez que presencia la lid se pone tenso, pero se mantiene en su lugar sin intervenir. Alondra era formidable, y si tenía algún tipo de ataque más poderoso guardado bajo la manga, la vida de Alina podría estar en peligro.
Lanzándose hacia adelante con el espíritu en un puño, los destellos protectores siguieron sucediéndose hasta que el cuerpo le dolía demasiado como para sostener su arma firmemente o moverse con nada que no fuese una leve cojera.
- Por segunda vez. Te ofrezco la rendición - Le hubiese gustado asestar al menos un golpe, pero tenía que ser consciente de sus limitaciones.
- Acepto... me rindo.
Mientras la lucha entre las dos participantes tenía lugar, Haakón ha tenido tiempo para terminar de llegar a la playa a golpe de remo.
En el último tramo salta al agua y él mismo acerca la barca, junto a quienes se ofrecieran a ayudar para cruzar ese último tramo.
Alisha es la primera en encaramarse ágilmente para regresar al barco, pero no sería la última.
- No pienso hacer este viaje más veces esta noche. Así que si alguien quiere regresar al barco para preparar sus cosas o pasar la noche, salimos ya.
Durante el combate permanecí apartado del grupo, principalmente porque no encontraba placer en la lucha y así tendria tiempo de aclarar ideas, no fue muy larga esta pero suficiente para mi como para tomar un par de decisiones.
Así que cuando Haakon dijo de quien iba a subir al barco yo tambien subí a la barca argumetando que necesitaba preparar material para la expedición de mañana que quizas necesitaran durante su viaje.
Cierto gato que había permanecido apartado de todo, sin posicionarse en ninguno de los dos esquemas dibujados en el suelo, como si aquello no fuese con él, sube también a la barca teniendo buen cuidado de no mojarse las patas.
Ya desde lo alto se gira a los reunidos - Dudo mucho que ninguna de esas esferas me represente. Aún así, no me opongo a que miren ninguna de ellas.
- Yo tampoco me opongo - agrega sin demostrar demasiado interes, perdida como estaba en sus pensamientos.
- Enhorabuena por aguantar más de cinco segundos - felicita Alondra a Alina al acabar su lid.
- Gracias por la batalla. Reconozco tu fuerza - responde a su vez, tendiendo a la contraria una de sus pociones en señal de paz.
Aunque en otras circunstancias era más que probable que Nero se hubiese quedado en la playa, tanto él como Hikari se unieron a Haakón en la barca.
Ella, izada con la ayuda del hombre a su lado. Él, con la agilidad de quien ha nacido con la sal en la sangre. Nero se coloca junto a Haakón para encargarse de uno de los remos. Bastante había hecho el viejo maestro trayendo la barca hasta aquel lugar él solo como para tener que repetir el esfuerzo en dirección contraria y con el sobrepeso de todos sus nuevos ocupantes.
- Yo tampoco me opondré a que vean mi esfera, siempre y cuando me informen a mi antes que a nadie de lo que encontrasen en ella. Yo juzgaré si la imagen es relevante para los demás. - Comenta Hikari en voz alta una vez está instalada.
Hallie parece dispuesta a pasar la noche en el barco, ya que es la única de entre los oráculos que acompañará al grupo a conocer a las gentes del pueblo... aunque su fuerte no sea tratar con la gente. Al igual que ella, Kazán no tiene ningún problema en llegar al barco por sus propios medios, gracias a sus alas.
Cedric estaba a punto de alejarse un poco con Alina, pero antes de que la barca esté demasiado lejos se encara a ella con porte solemne.
- Capitana, mis sinceras disculpas por faltar a nuestro pacto y que tengáis suerte en el pueblo - Acabando con una reverencia respetuosa y educada. La aludida guarda silencio con un único asentimiento como respuesta antes de voltearse hacia el mar. Sea lo que sea a lo que el celta se refería, no parece que ninguno de los dos estén dispuestos a dar más detalles.
Masud mira a los que se quedan en la playa como haciendo recuento - Ya que casi todos se quedan aquí... No, no salen las cuentas. Hallie - Se gira hacia ella, aprovechando que era de las pocas que tenía movilidad de sobra para ir y venir sin necesitar la barca - necesito que te quedes en la playa para una guardia con Brynja. - Hallie asiente a la petición, comprendiendo la necesidad de que estén todos protegidos - Yo bajaré con alguien más para hacer la segunda. Alondra... ¿Dónde vas a... ? ¿barco? Pues o te vas con la barca ahora o te quedas en la playa, tú verás. Y si te quedas, te toca segunda guardia. Si no puedo mandar a nadie yo mismo bajaré para hacer esa guardia.
- No hace falta que mandes a nadie, yo puedo hacer las dos guardias. Así podré terminar mis conversaciones pendientes.
Masud parece dudar, pero asiente. - Entonces que te acompañe Brynya en una y Hallie en la otra- No podía demorarse mucho más. Los minutos pasaban y empezaba a dudar que fuese capaz de dormir siquiera tres horas, como siguiese a ese ritmo. - A los que se vienen mañana de expedición, más les vale arañar cada minuto de sueño que puedan. Partimos antes de que amanezca - Y sin mucho más que aportar, Masud se tira al agua esperando que se pudiesen apañar.
Más de uno lamentó aquella madrugada que Masud fuese tan literal en lo que decía o dejaba de decir.
Después de que muchos durmiesen menos de lo que hubiesen tenido que hacerlo, el hijo de Sobek se encargó de despertar a los remolones para que se pusieran en movimiento.
Si alguno no había preparado una mochila de viaje la noche anterior se vería obligado a conformarse con las pocas vituallas que Hikari y Avgi habían dejado listas. Eso incluía una bolsa con una manta, comida para dos días, armaduras sencillas para quienes las quisieran* y poco más.
Sin saber lo que encontrarían que pudiesen traer, era prudente no ir demasiado cargados.
En algún momento el día antes Avgi ya hizo la prueba de tratar de dejar en su forja todo lo pesado. Mantas, comida... Sin embargo, cada vez que ella salía cerrando el portal, descubría que estas cosas estaban en el suelo. Como si la forja no aceptase portar nada que no se incluyese en lo que era su cometido, por lo que están obligados a lledar esas cosas consigo mismos.
Nero y Tau acompañaron a la barca con todos aquellos materiales de regreso a la playa, donde todos los demás habían preferido descansar
Cuando finalmente están reunidos y armados, salta a la vista que es Cedric el que se ha tomado más molestias en ir preparado. Su bolsa tiene un tamaño considerable, pero no parece costarle cargar con ella en absoluto. Tau también va algo cargado, pero llama más la atención Jezabel, quien ha escogido traerse consigo la guitarra... pero se encuentra con algo más de manos de su sobrino, obsequio de Alisha. Un Khopesh dorado que solo alguien con una gran fuerza sería capaz de manejar con elegancia. El familiar tacto de la empuñadura la ha esperado bastante tiempo, pero será su decisión el recuperarla o no.
Por su parte, Masud se presenta como de costumbre. Desarmado y sin armadura, aunque la naturaleza del poder de su sangre ya ha demostrado que no las necesita. La única diferencia es que por primera vez en días no está descalzo.
- Salimos ya. - Da la orden tras un abrazo sentido y un beso a su peliazul que no alarga demasiado. Está concentrado en la siguiente etapa del camino.
Haakón alza la voz antes de que se alejen. - Dos días. Intentaremos estar en contacto con los enlaces, pero si eso no funciona, nos veremos en esta cala - Masud solo asiente, recordando las instrucciones que se habían dado entre los oficiales, junto al maestro, el cual actuaría como refuerzo para el barco mientras los dos oficiales estuviesen fuera.
Ni a la capitana ni a Masud se le ocurriría privar al contramaestre de ese descanso que al parecer tanto necesitaba.
Aunque Brynja puede regresar al barco cuando le plazca, tanto ella como Alondra pueden acompañar a Haakon en el camino de regreso
No son tantos los que se quedan en la playa como te gustaría, pero sí que son más que suficientes para empezar a hacer pruebas y comparar las esencias de los unos frente a las de los otros e intentar encontrar hilos en común.
Si esos hilos no tienen relación ninguna con el Caos sabes que será difícil que los puedas distinguir con nitidez, pero a base de prueba y error...
La esencia de Brynja ya la conoces. Es enérgica. Eléctrica. Sus emociones saltan con intensidad y está claramente relacionada con el caos, aunque no pertenezca a él.
En Alondra, paradójicamente, sigues sin poder ver nada. Esa sensación de no estar ahí regresa.
La esencia de Avgi es luminosa, pero es un brillo frío. Casi romántico. Intensa.
Incluso dormito, necesitas esforzarte para ver las hebras de Cedric. Si comparas lo con Brynja y Avgi, tiene un brillo mucho más comedido que las otras. Sin tanta intensidad. Solo la promesa de lo que podría ser.
Hallie está despierta. Tiene algo que la relaciona con Nero y con al menos una persona más que no está ahora presente. No caes en la cuenta de quien puede ser.
A Kazán logras echarle un vistazo de lejos cuando Alina lo retiene para hablar, pero está despierto. Te sucede con él algo muy parecido a lo que te sucede con Alondra. Como si no pudieses verlo.
Con respecto a Alina, su propia energía tiene un tono tenue, aunque hay un aura más brillante que la recubre como si de un manto protector se tratara.