Una historia de invierno
Entré en aquella casa tras la anciana enlutada y su bastón. Se sentó frente al fuego, agarrada a su rosario como si no hubiera un mañana.
-¿Señora María? -la anciana ni siquiera levantó la vista para mirarme desde que me abrió la puerta -Soy Joaquín, del periódico, ¿se acuerda? Hablé con su sobrina por teléfono. Me dijo que podía venir hoy.
La casa era algo lúgubre. Cosas referentes al mar colgaban de sus paredes a modo de decoración, y también algún cuadro con olas y barcos. No podía esperarse menos de una casa de pescadores.
Miré a la anciana de reojo, mientras fingía estar inmensamente interesado en abrir mi libreta por la página correcta. Parecía que no dejaba de mirar su rosario, pero sabía que ella también me estaba observando.
-Llega tarde -me dijo simplemente, y después guardó silencio.
-Sí, yo.. me he retrasado, lo siento. Tengo mi grabadora -dije, poniéndola sobre la mesa-. ¿Le parece que empecemos?
-No hay mucho que decir -volvió a ser lapidaria en su frase. Definitivamente iba a costarme mucho sacarle algo a esta señora.
-Bueno, yo creo que su historia merece la pena ser contada.. ¿no cree? -intenté seguir con el tira y afloja, pero si la mujer no se explayaba, mi artículo iba a quedar bastante flojo. Pensé en mi jefe, arrojando mi porfafolios de nuevo a la basura.. Más me valía esmerarme-. ¿Por qué lo hace? ¿Por qué va cada día sin falta a la playa?
Antes de que pudiera darme cuenta, una lágrima asomaba por el ojo de la anciana. ¿Estaba llorando? No podía creerlo. Y sin más, comenzó a hablar.
-La playa.. La mar.. Sí, la mar.. ¿Se sorprende? -dijo, mirándome-.. Aquí en Galicia, el mar no es el mar. El mar es mujer, y como a hembra de respeto la tratamos. La mar es poderosa, y nos hace gente de fortuna, o seres desgraciados de por vida. A mí me hizo desgraciada.. -alzó brevemente la vista, y prosiguió, volviendo a perderse en el vacío de sus recuerdos-. Toda mi vida trabajé duro. Mucho, muchísimo, más de lo que quisiera recordar.. En un pueblo de pescadores siempre hay faena que hacer. Las mujeres cosemos las redes que los peces rompen, o la mar rasga. Cuidamos la casa, cuidamos de todo. Esperamos a que nuestros pescadores regresen, padres, hermanos, hijos.. Es una vida muy dura. Y yo fui joven como usted, ¿sabe?.. Hija y hermana de marineros, y yo también me enamoré. Él era pescador, por supuesto. Manuel.. Todo un galán, cuando quería. Y muy formal también ¿eh? Y a mí me costaba mucho verlo embarcar. La mar siempre me dió mucho respeto.. Siempre me decía que el siguiente sería su último viaje en barco, y sé que intentaba que así fuese, pero la tierra trata mal a los que llevan el agua salada en el corazón. Acababa volviendo a la faena, porque la mar también era su vida, y yo sufriendo por verlo marchar. Cuando tuve a Xoán, él estaba embarcado, y conoció a su hijo ya con meses.. Es la vida de los pobres -pasó una de las cuentas de su rosario.
-Xoán tampoco conoció otra vida más que la marinera, y no le exagero si digo que aprendió a andar en un barco. Cuando tuvo edad, ayudó de grumete en barcos de amigos, y poco a poco el mar fue también llenando su corazón. Y faenaban juntos, padre e hijo. Yo cosía sus redes. Cada día la pesca era más escasa, y cada día tenían que faenar un poco más lejos. Con sol o lluvia, que los patrones no entienden de clima. En esos días había una mala racha de peces, pero sin ellos no había paga. Mis hombres tenían que llegar a tiempo para subastarlos en la lonja.. Allá se me fueron los dos, y yo rezando.. Algo negro presentí, pero solo hacía viento por entonces. El viento fue a más, y el mar empezó a picarse. Yo esperaba ver llegar la luz de su barca en la negrura de la bahía, pero eran otros pescadores los que volvían, no los míos, y mi corazón se batía con las olas cada vez más grandes que la tormenta desató. La lluvia me empapaba, pero yo no quería irme sin saber, aunque ya lo sabía. La mar es poderosa..
Se enjugó los ojos con el dorso de la mano. Yo permanecía callado, no había mucho que decir ante su drama.
-Nunca los encontraron. Ni restos de su barca, ni a ellos. Los buscaron mucho, yo lo sé. Pero fue la tormenta más grande que alguien podía recordar, ni se vió otra igual desde entonces.. Y la incertidumbre de no saber dió paso a la rabia del convencimiento. La mar se los había quedado.. La mar me los quitó. Con sus olas de tormenta rompió mi vida y no quiso ni devolvérmelos para poder llorarles como es debido.. Cuántas veces pensé en ahogarme con ellos.. Pero la mar ni eso me concedió. Nunca tuve valor ni fuerzas. Y aquí ando, ya de vieja. Sé que llamo la atención, y me sacan fotos. Me llaman loca, lo sé, y por eso está usted aquí. Una vieja que hasta en invierno se descalza y se pasea con su bastón por la orilla.. pero.. ¿qué quiere? Voy cada día a la playa porque es lo único que me queda de mi familia. Ya la mar es mi familia..
No sabía qué decir. Apagué la grabadora.
Estremecido por la historia y su tragedia, me despedí de la anciana y salí de la casa. Antes de partir, la señora María me agarró del brazo, susurrándome:
-No me enterrarán, ¿sabe? -me dijo-. Quiero irme a la mar con ellos.
Y dejé atrás a la anciana, a la que una mala tormenta truncó la vida, y a la que solo la mar da consuelo.
Plazo de comentarios: del 11/03/2014 al 24/03/2014
Por si alguien tiene dudas, aquí está la guía para comentar el relato:
http://www.comunidadumbria.com/partida/taller-de-relatos-cortos/guia-para-comentar-un-relato?__Pg=1
Os recomiendo no dejarlo para el último día que luego no da tiempo ^^
FORMA 4
No hay mucho que reseñar. Quizás en el principio del relato agruparía algunos de los cortos párrafos para formar otros un poco más extensos. Contrasta mucho con cuando la anciana comienza a relatar la historia.
Recuerda que los puntos suspensivos son tres, no dos.
¿eh? Es “¿Eh? En mayúscula
CONTENIDO 4,5
La historia es estremecedora. Un relato intenso e interesante. La temática está un poco traída de los pelos, pero no seré yo el que lo penalice. Sólo hay un pequeñísimo pero, el final. Es trevisible y no aporta mucho, de todos modos el resto de la narración es excelente.
COMENTARIO PERSONAL 4,25
Me gusta como está tratado el tema y la personalidad de la anciana, como afronta la situación y como se trata el tema en general. Genial relato, repasa lo bueno y ten en cuenta como se puede mejorar para futuros textos.
Forma: 4,5
No tengo mucho que decir sobre la forma. La ortografía y gramática es prácticamente impecable, a excepción quizás de alguna coma que se escapa o que faltaría en algún lugar. Por lo demás, está bien estructurado, permitiendo que la historia sea fácil de seguir y existe una cohesión entre los elementos.
Si tuviera que cambiar algo, quizás buscaría separar de alguna forma el monólogo de la anciana, pues es tan largo que incluirlo todo en un mismo párrafo puede parecer algo aglomerado. O puede que la siguiente expresión, al tratarse de una especie de pregunta retórica, la pusiera entre signos de interrogación: ¿Cuántas veces pensé en ahogarme con ellos?
Contenido: 5
Realmente el relato consigue crear una atmósfera envolvente. Me podía imaginar a mi misma entrando en esa habitación y no sé porqué (ya que no estaba escrito como parte del relato) también imaginaba la lluvia cayendo en el exterior, quizás a causa del tono algo dramático de la trama.
A mi modo de ver, los personajes están muy bien caracterizados: la abuela habla como solo alguien con mucha experiencia y vivencias encima podría hacerlo y los pensamientos y comportamiento del chico concuerdan perfectamente con la imagen que a mí me da de chico joven y con poca experiencia que busca hacer su trabajo bien y ganarse el favor de su jefe.
Aunque en cierto modo es previsible que la tragedia va a estar relacionada con la mar, no es el qué pasó sino el cómo se cuenta lo que consigue que este relato enganche y sea ameno.
Comentario personal: 5
El relato me ha encantado. Me gusta la manera de abordar el tema de los desastres naturales desde el punto de vista de una persona que sufre sus consecuencias indirectas. Es conmovedor y consigue sumergirte en él proporcionando una lectura agradable, equiparable a la de cualquier novela de hoy en día. Sobretodo me gusta el personaje de la abuela y el modo en que le has dado vida.
Esta es la primera vez que participo en el taller de relatos y no tengo mucha idea sobre cómo comentar un relato. Aún así, espero que mis comentarios te sirvan de algo. ^^
FORMA 3
Sencillo pero potente, lenguaje claro con toques castizos que hace que tanto personas como ubicaciones sean faciles de localizar
CONTENIDO 3
Duro pero real, he tenido familia marina y por ello puedo ver muchas de las cosas que pintas en el relato, recuerdos de Galicia y de como la vida de los pescadores puede ser jodidamente dura a veces.
COMENTARIO PERSONAL 3
Toque tragico pero todo el que conoce LA mar puede empatizar con el relato; nunca he sido de finales tragicos pero en este relato he de reconocer que no podia acabar de otra manera.