Partida Rol por web

-Entonces está claro, dijo Eliver. -Tres se quedarán aquí, y los demás partiremos hacia Sil Auressë, pasando por la colina donde tuvo lugar el encuentro con el huargo. Excepto Eärnil que irá directo a caballo hasta la aldea.

-Tres se quedarán. Pero -Denelloth adelantó la mano, corrigiendo a Eliver- no así. Russef se queda, al haberse ofrecido el primero y sin reticencias. Tus habilidades en las tierras salvajes serán de utilidad, creo. Pero no Girion; será de más ayuda encontrando a su caballo.

Denelloth mantuvo por un instante la mirada en el joven dúnadan, y luego en el bribonzuelo de Tharbad, como evaluándolos. -Ragi, esas cualidades para pasar desapercibido es lo que esperamos de tí. Y tú, Eärnil, sólo te convertirás en mensajero al amanecer si no hay nuevas o de inmediato en caso de emergencia; en ese momento, cabalga lo más rápido que puedas. El resto del tiempo te ocuparás de la seguridad del grupo. Recordad -añadió, dirigiéndose específicamente a los tres hombres-: nuestro objetivo es conocer culquier actividad que se produzca en el bosquecillo, no intervenir. Manteneos lo más lejos posible del claro, sobre todo si hay movimiento, ya imaginamos para qué se pueden reunir: nada bueno. Es vital no ser vistos, huid si sois descubiertos y ganad Sil Auressë por vuestros medios; si debéis luchar, que sea con la certeza de que ningún enemigo sobrevivirá. Ocultad bien el caballo. Y tened mucho cuidado, por favor. No sé que estrategias adoptará Sil Auressë, pero manteneos aquí hasta nueva orden; tranquilos, que no descuidaremos vuestra peligrosa situacion.

El montaraz miró al cielo, buscando ávidamente cualquier silueta reconocible en la lejanía.

-El resto, preparados para partir, como ha dicho Eliver. Cuanto antes, mejor.

Ragi asintió ante las instrucciones de Denelloth. La sustitución del joven Girión por el curtido Eärnil le tranquilizó en parte. Pero no veía claro quedarse en aquel lugar esperando noticias de Sil Auressë.

- 'Denelloth,' - dijo. El sombrío montaraz le seguía imponiendo respeto, pero era necesario aclarar esto - 'No teníamos previsto pasar más de esta noche fuera y hemos venido ligeros, tal y como nos dijiste. Yo puedo contar con mi capa para guarecerme, pero no tenemos comida para pasar varios días aquí. Y no parece prudente que dediquemos tiempo a buscar comida. Aunque en la noche de mañana no veamos nada, tendremos que regresar.' -

Denelloth miró a Ragi cuando terminó de exponer sus preocupaciones, rascándose el mentón y respondiendo con suavidad. -Ragi, no descuidaremos vuestra posición. Cuento con que tengáis noticias nuestras antes de que transcurran las dos próximas noches. Si no es así, haréis bien en volver a Sil Auressë cuando se os terminen los víveres. Sé -ahora pone su mano en el hombro del joven Ragi, pero mira también a Russef y Eärnil- que no será una espera agradable ni cómoda, pero instalaos como mejor podáis. Ni fuego ni chozas ni nada por el estilo, por supuesto. Podéis hacer rondas en torno al bosquecillo o turnos de vigilancia, según la situación y vuestro buen tino os indiquen, pero ante todo, que no se advierta vuestra presencia. Procurad estar descansados y sed pacientes. Y que Varda os acompañe.

Vuelve a mirar al cielo, y luego a sus compañeros. -¿Alguna cosa que quede por concretar antes de separarnos?

Cuando Eliver le designo como uno de los que se quedaban Girion miró a este pero ocultó sus sentimientos, como solía hacer. La verdad es que no era muy de su agrado quedarse y no sabría que hacer si debían buscar algo o seguir a alguien. Pero por otro lado era una aventura más que vivir y una experiencia que sin duda le daría conocimientos para el devenir duyo.

Pero entonces intervino Denelloth lo dejó claro. El joven se iría con ellos. Tampocodijo nada, pero parecía más aliviado.

Mirando a sus compañeros espero a marchar junto a la comitiva que volvía a Sil Auressë.

El grupo de exploradores se separó en dos. Ragi, Russef y Eärnil se quedaron atrás para vigilar el claro, mientras Denelloth dirigió a Eliver, Wulfgar, Eben y Girion hacia Sil Auressë, saliendo del bosque hacia el sudoeste.