Partida Rol por web

Sil Auressë

[7.7.1] Preparativos e Invitaciones

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09/07/2016, 23:03
Curudae

-En pocos días empezamos los preparativos finales para la fiesta. No tengo confirmación de los armeros, espero que acudan. Lo que sí he sacado son los totales de lo que pide Khôradur, y me temo que están muy por encima de nuestras posibilidades. Como te he dicho, no podemos contar con los ingresos de Sil Auresse de momento, y el coste de la equipación del ejército es, aproximadamente, como sigue:

            Guardias: 108 monedas de plata x 20 guardias = 2160 mp

            Soldados: 68,5 monedas de plata x 32 soldados = 2192 mp

            Milicia: 27,5 monedas de plata x 160 milicianos = 4400 mp

-En total, aún contando con el cambio favorable de plata a oro, serían unos 875 oros. Las licencias para herrería o tiendas las he tasado en unos 80 oros, pero estamos muy lejos de esas cifras. Va a ser una negociación muy dura…

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09/07/2016, 23:04
Ayla

-Bien, pues entonces tendré que pensar en otras fuentes para obtener oro..., vamos a tener que darle más trabajo a nuestro mensajero. Se ganará el sueldo este mes... ¿Qué te parece hacerle llegar esta carta a Adhellin?

Adhellin de Tharbad:

Querido Adhellin, como supongo te acordarás, en nuestro último encuentro debí prescindir de tus servicios, pero si bien te dije que sería momentáneamente, ya que Sil Aurësse está creado para el conocimiento y necesita a los mejores. El otro día comenté a los maestros de la Academia, que deseaba crear libro, un libro con un conocimiento valioso para quien sepa utilizarlo, un libro del que he recopilado información durante mi vida y ha llegado el momento de que pase de ser meros apuntes, a que tome forma de libro. Reuní a los maestros de la Academia y les expuse mi idea, y les pregunté si tú sabías del oficio. Cuando ví tus credenciales sabía que habría una posibilidad de que conocieras éste arte, y no solo sino que los maestros me sorprendieron y me dijeron que eres de los mejores en ese arte. En nuestro último encuentro reconociste que no tenías nada que ofrecer, no traías alumnos como otros, y que necesitabas el dinero. Todo tiene su momento y el tuyo ha llegado… Sil Aurësse te llama para que vengas a desarrollar tus conocimientos y que los enseñes. Mientras permanezcas en Sil Aurësse, tendrás alimento, un techo que te cobije y el amor de todos tus compañeros.

En cuanto a tu remuneración, hemos decidido que sea a comisión. La idea es elaborar libros de mayor elaboración  (y mas caros) y otros menos elaborados y mas accesibles. Los Maestros realizarán libros, yo realizaré libros que luego tu les darías forma y unos irán destinados a la Biblioteca de Sil Aurësse y otros  a la venta. Ahora mismo, lo que Sil Auresse puede ofrecerte es un 10% de los beneficios, y de momento no se puede negociar. Ahora tenemos que hacer todos un esfuerzo que se verá recompensado cuando Sil Aurësse se consolide. Sabemos que los libros se pueden vender caros y partimos de que tenemos uno listo para elaborar, que podría venderse a muy buen precio, con lo que podría resultarte muy interesante nuestra oferta. Además podrás dar clases en la Academia con los demás maestros, pero a título parcial como otros miembros que tenemos como auxiliares a la Academia.

En vista de lo expuesto, Sil Aurësse y yo, la Dama Aylarien, os invitamos para que os presentéis aquí a la mayor brevedad posible para comenzar vuestro cometido, “Maestro Adhellin”.

Esperamos tu contestación desde Sil Auresse.

Que los Valar guíen tu camino, y que la luz lo ilumine.

Aylarien de Sil Auresse

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09/07/2016, 23:05
Ayla

-Por otro lado, la idea de Khôradur es muy inteligente, deberíamos enviar una misiva a "nuestros vecinos" informándoles de la Academia. o incluso uno de los Maestros. No son diplomáticos, pero nadie sabe como ellos, como es la situación de la Academia y las posibilidades que ofrece. Podríamos enviar un maestro y un Diplomático. ¿Qué te parece mejor opción, enviar invitaciones, o a alguien que sepa, sienta, conozca y defienda la Academia?

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09/07/2016, 23:06
Director

Otro día, estaban sentados los tres en una mesa de roble dentro de la Casa de Comercio. Ya estaba casi terminada la obra, falta solamente algún trabajo interior. Por dentro era muy sencillo, se habían quitado el máximo de paredes para hacer una gran sala con un almacén al fondo para documentos y para almacenar cosas. En la segunda planta, donde antes habían estado las habitaciones de los huéspedes de la posada, ahora había despachos para futuro uso y para reuniones, que ahora servirían para poder abandonar las tiendas de campaña. Ahora mismo estaban en el despacho más grande (antes dormitorio común), en la segunda planta. Además de la mesa de roble antigua y algunas sillas, había un armario y una ventana sin cristales de momento, pero que se podía cerrar con lamas de madera. La tenían abierta a pesar de la gélida mañana, para poder observar la vista privilegiada hasta la plaza.

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09/07/2016, 23:07
Curudae

-Desde aquí trabajaremos durante al menos un año, hasta que se termine el castillo, dijo Curudae, visiblemente orgulloso de cómo estaba avanzando el gran proyecto que era Sil Auressë. -Hay un despacho pequeño para ti, con una cama y un aseo. Otro un poco más grande para recibir el tema de los impuestos, donde también dormiré. Luego está esta sala de reuniones, y dos habitaciones para archivos o el uso que le demos. Khôradur ha insistido en seguir “a pie de campo”, es decir, en su tienda de campaña, dijo el Senescal mientras seguía comiendo el desayuno. Le miró a Khôradur con una sonrisa que denotaba complicidad y buen ambiente entre los dos colaboradores más importantes de Ayla.

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09/07/2016, 23:08
Khôradur

-Así es. No estoy acostumbrado a tanto lujo, dijo el descendiente de Númenor mientras observaba el salón rudimentario sujetado con vigas de madera y con las paredes llenas de parches a falta de relucir… Lo miraba con cara de asombro, como si de un gran palacio de los elfos se tratara. A pesar del tiempo que llevaban ya juntos, aún tenían la sensación de que Khôradur tenía facetas desconocidas para los demás. El sentido del humor algo seco pero inteligente era una de ellas. -Agradezco la invitación, pero mi trabajo es allá fuera, y no quiero que mis hombres se acostumbren a buscarme en un despacho… Sí que acudiré a estas reuniones matutinas, así como cualquier otro Consejo que se celebre.

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09/07/2016, 23:10
Director

Hablaron a continuación del problema de equipar la milicia y los soldados. Khôradur opinó que quizá sea preferible esperar un poco hasta tener algo más de fondos. Además, a falta de una semana para la fiesta no habían contestado los armeros de Tharbad.

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09/07/2016, 23:11
Curudae

-El problema de que no contesten puede estar relacionado con el Gremio de los Armeros, comentó Curudae. -Posiblemente envíen a un representante, pero si viene de parte del Gremio, mal asunto… Querrán encima cobrar una cuota por pertenecer a ese Gremio tan poderoso. Porque no es lo mismo herrero que armero. En fin, seguiremos trabajando en el tema, y si Khôradur está de acuerdo en aguantar unas semanas o meses mientras reunimos oro de nuevas fuentes y trabajamos un poco más los gremios y buscamos armeros que no les pertenezcan… Pues eso haremos.

-En cuanto a la carta a Adhellin, me parece muy bien el tono general. La parte donde realmente quieres mi opinión es en el 10%... Dices que es del beneficio. Eso, como comerciante, es algo ambiguo. Como norma, se entiende que si es a comisión, le pagarías al artesano un tanto por cien del valor de venta. Es decir, que si lo vendes por 50 oros, le tienes que dar 5 a él. Si es así, creo que es una oferta aceptable para el libro que comentas, cuyo contenido es el que le da el valor. Ahora bien, para libros más “genéricos”, donde lo que busca el comprador es la belleza y el acabado, además del contenido, y además se venden por menos cantidad… En esos casos lo veo algo bajo. Pero hay que ganar dinero, y Adhellin también estará necesitado. ¿Qué pasa con los libros que se quedan en la biblioteca? Se sobreentiende que él recibirá su parte del valor del libro, aunque lo “compre” Sil Auressë. Con todo eso aclarado, y la promesa de tiempos mejores, creo que no dudará en aceptar. Debes reservar algo de fondos tuyos para material básico de encuadernación, pieles, pergaminos y lo demás. Para ahorrar tiempo, si te parece, le comento más en detalle el contenido de la carta al mensajero y que también se encargue de comprar lo necesario en Tharbad, siempre y cuando Adhellin acepte. Al mismo tiempo, le voy a pedir que investigue un poco más cómo está el tema de los armeros y coraceros, y si podría haber alguien interesado en abandonar el gremio…

-El mensajero debe ser algo más que simplemente entregar cartas. Cobra un buen sueldo, y debe tener dotes de diplomático y educación. Es nuestro representante, aunque sin personalidad propia. Le estoy enseñando y preparando, y es alguien con buenos conocimientos de idiomas y es de confianza. Con el tiempo, para el segundo año, necesitaremos más.

-En cuanto a la Academia, no tengo plazos exactos para la construcción del edificio, que será dentro de las murallas del castillo. Mientras tanto, podríamos habilitar partes de esta Casa de Comercio, pero no sería lo mismo…

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09/07/2016, 23:13
Khôradur

Intervino Khôradur: -debemos ganar tiempo, para no quedar mal con los nobles de la región por vender algo que no se ajusta a sus expectativas. Una invitación, si es contestada, puede acarrearnos ese problema. La Academia debe venderla alguien que la sienta, como bien dices. Sin embargo, no podemos permitirnos el lujo de perder a uno de los maestros para ir tocando las mansiones y las granjas de la región. Propongo lo siguiente. El mes que viene empezamos la construcción de las murallas del castillo. Para entonces, los exploradores me habrán informado de la región que nos pertenece y la que nos rodea. Dentro de unos meses, me gustaría contar con los servicios de Adhellin para hacer un gran mapa de la zona. Pero antes, enviaré a los exploradores para localizar a las casas repartidas hacia el sur y sureste. Por el otro lado, el mensajero podría visitar la zona del antiguo Dol Tinare, en el norte. Entregaríamos cartas (siempre a través del mensajero, los exploradores informarían en Sil Auresse primero) donde se les habla de la Academia y donde ofrecemos acudir a explicarla con más detalle. De esta forma, el enviado de la Academia iría a una reunión concertada a hablar con alguien interesado, en un principio, en el tema. Ese enviado podría ser uno de los maestros, o incluso tú Ayla en algún caso especial.

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09/07/2016, 23:14
Curudae

-Yo lo veo interesante, dijo Curudae, -y supongo que lo de enviar exploradores al sur y el mensajero al norte es por el tema de la seguridad. Si te parece bien, Ayla, habría que ir pensando quién de los maestros encajaría en ese perfil.

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09/07/2016, 23:15
Ayla

-Veo perfecto las indicaciones que puedas darle al mensajero, supongo que Adhellin aceptará, y más con la visión  de editar un libro con grandes expectativas de beneficio en breve. Por otro lado, nos interesaría buscar a armeros fuera del gremio. ¿No hay nadie en esta zona que quiera aprender el oficio, o que no pertenezca al gremio? Podríamos enviar a algún aprendiz a Tierras lejanas para que se especialice y aprenda a fondo su oficio, para volver a Sil Aüresse a poder exponer al máximo su obra, aunque eso llevará muucho tiempo.

-En cuanto a la Academia, no creo que la Casa de Comercio sea el mejor sitio, por el momento. Hay mucho ruido aquí no podrán concentrarse ni alumnos ni maestros. Tal vez con algunas de las tiendas que han quedado libres se les podría hacer algo mejor en un emplazamiento más tranquilo, pero intramuros por supuesto. Además coincido también en la opinión de Khoradur, y así se hará. Iré pensando en la persona idónea para ir a promocionar la Academia...

-Estoy rodeada de los mejores, nobles señores. Sin vosotros esto no sería posible, no hay otra persona que pueda desempeñar los que vosotros haceis aquí. Ahora lo estamos dando todo por Sil Auressë, y un dia Sil Auressë responderá...

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09/07/2016, 23:16
Curudae

-Lo de Adhellin está decidido entonces, concluyó Curudae. -Preparo al mensajero, y haremos correr la voz de que en Sil Auressë se necesitan armeros que hayan aprendido su arte y su oficio en tierras lejanas, o quiénes por otro motivo no dependan ni deban nada a los gremios. De forma disimulada para no despertar las iras del gremio, claro. Aparecerá alguien, estoy seguro.

-La Academia tendrá que conformarse con una de las tiendas de madera, aunque va a ser solamente una solución temporal. En la fiesta empezaremos a vender licencias para tiendas, y también las tiendas que ya tengamos hechas. La de la Academia será la última en venderse, pero si hay comprador no nos queda otra que venderla. Las obras del mercado están casi terminadas, y en breve podremos desplazar un grupo de construcción a la zona del castillo. Hablaré con los arquitectos para que prioricen todo lo posible la construcción del edificio de la Academia en la parte del Castillo. Que empiecen con las murallas y a continuación se haga la Academia.

-Pero antes toca ultimar los preparativos de la fiesta. Habrá comida, bebida y música, así como algunos juegos, competiciones y otro entrenamiento. Nada del otro mundo, pero suficiente para levantar la moral. Además, sirve de inauguración al mercado y punto de partida para el comienzo de la construcción… Creo que te va a tocar hacer otro de tus discursos, Ayla, le dijo Curudae. -Si te parece me encargaré de la venta de las tiendas y de las licencias. Khôradur ha preparado una serie de juegos y competiciones deportivas y de armas. Será divertido, y nos dará un respiro a todos.

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09/07/2016, 23:18
Director

Con las mismas, se despidió Curudae y también Khôradur. Ayla se quedó sentada en el salón, pensativa. Al poco rato se acercó el Chambelán Paddrec

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09/07/2016, 23:18
[SA-serv] Paddrec

-Dama Aylarien, la habitación está lista. ¿Desea que traslademos las cosas de la tienda? Hay una cama, un escritorio, un armario para ropa, un cofre que se puede cerrar, y la silla más cómoda que he podido encontrar. ¿Necesita alguna cosa más?

Detrás de Paddrec se podía ver un par de sirvientas saliendo de la habitación a la que hacía referencia. No era muy grande, y las paredes de piedra gruesa tenían forma curva al coincidir con la parte donde antes había estado la torre. Desde fuera Ayla recordaba haber visto que ya no quedaba casi nada de aquella torre, salvo esta parte. Tenía una ventana con lamas de madera, con vistas al este, hacia fuera de los muros del mercado.

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09/07/2016, 23:20
Ayla

Con la mente perdida en el futuro de Sil Aüresse, en la fiesta... Ayla se giró y le dijo: -no Paddrec, no hace falta nada más, trasladad mis cosas a la habitación y descansad...

Se quedó pensando en Adhellin y los armeros... Sil Auressë, daba pequeños pasos, pero había muchas cosas que aún escapaban de su control y dependían de los Valar, pero si ellos le habían guiado hasta aquí era por un propósito... Pensó en Amon Lind, en cómo tuvieron que esconderse y construir aquella maravilla, en como habrían sido sus primeros pasos y como lo terminarían... Se acordaba de la caja que le habían dado, la caja que le dijeron que solo habriera cuando la torre estuviese terminada, ¿qué contendrá? Seguro que merecía la pena la espera...

Dejo que su mente volara, y pensó en el día de la fiesta, la gente riendo, Danroth, Curudae, Khoradur... Y en ella, ante una multitud atenta a sus palabras... Veía como le intimidaba al principio, pero luego nació de ella la seguridad que caracterizará a Sil Aüresse y como se contagiaba la multitud... Será el nacimiento de una nueva luz...

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09/07/2016, 23:23
Director

Una vez le habían subido sus pocas posesiones, Ayla se quedó meditando en su pequeño cuarto. Tras semanas y semanas en la tienda de campaña, incluso la austeridad de este pequeño cuarto le resultaba un lujo. Sus pensamientos vagaban por distintos sitios, lugares y momentos. Recordaba de nuevo Amon Lind, y reflexionaba sobre sus inicios. Más fuerte que las piedras, el laen o el mármol con el que se construyó eran los auténticos cimientos de aquella obra. Las ideas y los principios. Por encima todo la libertad para perseguir los sueños individuales de un grupo extraordinario de personas. Ese sueño no era el de Sil Auresse, al menos no hasta ese extremo. Aquí se trataba de hacer todos partícipes de un ideal, de una forma distinta de convivencia y progreso. Pero sí coincidían ambos lugares en el que ambos tenían una idea como punto de partida. Y esa idea, ese sueño, permitiría a Sil Auresse superar las dificultades de la misma forma que Amon Lind lo hizo.

Demasiadas cosas estaban aún a la merced de los designios de los valar, o la caprichosa suerte. En algunas cosas el tiempo jugaba a su favor, y en otras no. Mantener ese equilibrio no era fácil. Y detrás, escondido en algún lugar de su subconsciente, pero siempre presente, estaba su tarea, su cometido, como Guardiana de la Luz. De momento tendría que esperar, pero siempre estaba allí. Hasta que fuera resuelto.

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