REINO DE NEUSTRIA
Reyes de Neustria (Francia y Borgoña): Su Majestad Alain ap Ailil (Oscuro) y Su Majestad Vin ni Gwydion (Luminosa)
Heredad: Ile-de-France, Vermandois, Reims, Sens, Troyes, Orleans, Bourges, Boulgone, Artois
Duque de las Nubes (Bretaña): Lord Sirius ap Beaumayn (Luminoso)
Heredad: Rennes, Leon, Cornualles, Vannes, Nantes
Conde de Penthievre
Duquesa de las Lanzas Rotas (Normandía): Lady Hiver ni Eiluned (Oscura)
Heredad: Arques, Vexin, Avranches, Anjou, Evreux
Conde de Amiens
Conde de Maine
Conde de Eu
Duque de las Aguas de Plata (Borbón): Lord Évrard ap Fiona (Luminoso)
Heredad: La Marche, Forez
Duquesa de las Viñas Púrpura (Borgoña): Lady Aurore ni Eiluned (Oscura)
Heredad: Tourraine, Maçon, Charolais, Dijon, Chalons, Besançon
Conde de Lemosin
Duquesa del Leopardo Rampante (Aquitania): Lady Sagitta ni Gwydion (Luminosa)
Heredad: Agen, Toulouse, Rouergue, Gevaudan
Conde de Carcassonne
Duque de los Vientos (Gascuña): Lord Ghyslain ap Varich (Oscuro)
Heredad: Bordeaux, Albret, Bearn
Conde de Narbona
Conde de Foix
Conde de Armagnac
Duque de las Aguas Zafiro (Poitou): Lord Gratien ap Dougal (Oscuro)
Heredad: Thouars, Poitiers, Lusignan, Saintonge
Conde de Anguleme
Conde de Verdún
Conde de Auxerre
Conde de Nevers
Conde de Auvernia
Conde de Perigord
Conde de Vendome
Conde de Chartres
Conde de Viviers
Condes de la Flor de Piedra (Blois)
Sobre Neustria
Antes del año 69, los plebeyos ocupaban lo que ahora se conoce como el Reino de Neustria con una suerte de consejos municipales, intentos de comunismo y anarquismo, alguna que otra república socialista y territorios dominados por una mano de hierro autocrática. A la llegada de los nobles, los plebeyos tenían suficiente intentando vencer a la Banalidad y guerreando entre sí. Los sidhes tomaron posiciones sin apenas encontrar resistencia, y a aquellos que se les atrevió levantarse, se les ejecutó y castigó con gran eficiencia. El abrumador número y poder de la Hueste Resplandeciente echó por tierra cualquier intento de sublevación plebeya. Se reestablecieron los antiguos reinos de Galia y Burgundia, que no tardaron en enfrentarse entre sí. Sin embargo, fueron fusionados con gran sabiduría gracias a un matrimonio concertado entre sus herederos, quedando así el Reino de Neustria que conocemos hoy en día.
Los monarcas actuales son el Rey Alain, de la casa Ailil y la Corte Oscura y la Reina Vin, de la casa Gwydion y la Corte Luminosa. Como parte del pacto de fusión del Reino, está establecido que el Rey Alain gobierna desde Samhain hasta Beltaine, y la Reina Vin desde Beltaine a Samhain.
Del mismo modo que para Sus Majestades, es práctica normal en Neustria la de los gobiernos cambiantes entre Luminosos y Oscuros. Con la fecha de Beltaine y de Samhain como marcas de cambio, cada gobernante tiene seis meses para ejercer su voluntad en pleno. Esto es así en Neustria, a diferencia de la mayor parte del resto de reinos, debido a que el número de nobles es muy alto. De este modo, todos tienen un papel y un título y pueden aprovechar sus dotes de liderazgo por igual.
Sin embargo, y como es de esperar, las tensiones entre las dos Cortes se han hecho fuertes. Como si de un gobierno bipartidista se tratara, los periodos de gobierno de uno intentan ser boicoteados por el otro con la intención de sobresalir, competir o, simplemente, molestar.
No todo en el territorio se sigue esta tradición, que no es obligatoria aunque sí preferible. La mayoría de los duques se mantienen en su puesto durante todo el año, a excepción de las Aguas Zafiro y el Leopardo Rampante.
Población feérica
Un hecho importante en Neustria es la escasez de trolls en todo el Reino, lo que da a entender que la pasividad de los rebeldes durante la Guerra del Tratado sea debido a esto. En cambio, los sátiros abundan, así como los boggan. Existen pocos eshu que hayan realizado algún juramento de fidelidad (suele haber mucho turismo, por otro lado) y los sluagh apenas se conocen. O están escondidos o realmente prefieren lugares más fríos y húmedos, como Albión.
El porcentaje es el siguiente:
La curiosa disposición de los nobles frente a los plebeyos ha convertido el gobierno en casi totalmente tradicionalista, con unos toques despóticos importantes y una gran diferencia entre clases. El Tratado de Concordia y las concesiones a los plebeyos que ocurren en todo el mundo suenan a broma en las cortes de Neustria, donde los bufones y los criados no tienen ninguna posibilidad de cambiar de profesión, y mucho menos de participar en consejos o a parlamentos.
EL CONDADO DE LA FLOR DE PIEDRA
Vasallos directos del Rey, los Condes de Flor de Piedra gobiernan sobre el distrito de Loir et Cher y alrededores.
Las Baronías
Existen siete feudos en el condado.
La heredad de los Condes.
Castillo Real de Blois - El Castillo de la Flor de Piedra
La sede del Condado está en el Castillo Real de Blois. Por un lado, el Castillo en sí es un museo en el mundo mortal, además de escenario de rodajes de películas históricas. Esto produce una corriente de Glamour constante, además de mortales a los que encantar, inspirar y saquear. Por otro, el feudo en sí se encuentra en una de las alas del castillo, cerradas a los mortales y encantadas para parecer poco interesantes. El feudo es residencia de los Condes y su Corte. Además, durante la celebración de Verdor, Beltaine, la Noche Álgida y el Cumpleaños del Conde Lothar, los mortales están "invitados" y pueden ver las demostraciones de esgrima y justas que se celebran entonces, nutriendo de Glamour a los presentes.
El Castillo se encuentra en la ciudad de Blois, a orillas del Loira.
En el semblante feérico, el Castillo de Blois es una construcción hermosa, con rosas reales adornando la fachada y otorgando a la zona una fragancia exquisita. En el centro del patio se eleva una fuente feérica coronada por una flor de lis de piedra, que da nombre tanto al feudo como al condado. El Castillo es ocupado por el Conde Gobernante, con lo que es la residencia de verano del Conde Lothar y de invierno para la Condesa Sarianne.
Castillo Chambord - El Castillo de las Torres Negras
También un castillo real ocupado por las hadas, Chambord es un castillo de gran fama por su desmesura. Los sueños de su creador, Francisco I, dejaron una impronta dormida que reventó al regreso de la Hueste, abriéndose el feudo para ser ocupado por ella. Aunque es propiedad del estado francés, los duendes han manipulado el papeleo para poder pasar desapercibidos en él. El gran bosque que lo rodea es un hervidero de monstruos quiméricos que a los condes les encanta cazar. Cuando los Reyes visitan el Condado se quedan aquí, a salvo del mundanal ruido de la ciudad, y cazan y disfrutan de la residencia de retiro.
Es la residencia de invierno del Conde Lothar, y de verano de Sarianne, aunque se mueven entre este feudo y el de Blois a menudo, para participar en las sesiones de corte.
Fuente de Ambrosía
Un claro en un bosque. Un manantial surge de una piedra directamente, pero no es agua, sino vino y miel lo que produce. Aquel que lo bebe siente cómo su Banalidad desciende, aunque un uso excesivo puede llevar a la Confusión. Aunque no hay una construcción que permita a los viajeros quedarse a vivir en el feudo, el claro es supervisado por Ser Morgan en nombre de los Condes. Es un punto de reunión común para los sátiros, que celebran fiestas no lejos de aquí.
La Baronía de la Estrella Caída
Castillo de Cheverny - El Castillo de la Estrella Caída
Cheverny es un lugar muy lujoso y refinado. También está abierto a las visitas, por lo que los duendes sólo pueden utilizar una pequeña parte del mismo. Se dice que el Barón Quent encontró el feudo al surgir del Paso siguiendo una estrella fugaz. La estrella fue encontrada por el Gwydion en el patio del Castillo. La recogió y forjó con ella su tiara de Barón. Lord Quent reside aquí junto a su corte.
El Hogar
Un feudo que ocupa un edificio de tres plantas, una casa que se cree embrujada y perdida en el campo. Es una posada feérica que el Barón Quent arrienda a los plebeyos. Cualquier plebeyo tiene derecho a cama y a cena si viene aquí.
La Baronía de los Cedros
Castillo de Chaumont - El Castillo de los Cedros
El Castillo de Chaumont cuenta con una importante afluencia de mortales. Como lugar de encuentro de las artes, es rico en Glamour. El Castillo de los Cedros siempre se ha considerado un dulce regalo que los Condes han otorgado con cuidado... hasta la llegada de la Baronesa Marjolaine. El método poco ortodoxo de hacerse con él (ganar un concurso de enigmas) ha suscitado sospechas y acusaciones hacia ella.
La Baronía del Aliento de las Dunas
El Feudo del Aliento de las Dunas, antiguamente llamado Feudo de las Hiedras, es la baronía correspondiente a Lord Ibrahim ap Beaumayn. Al tomar posesión de él, la vegetación de los alrededores murió, y grandes dunas comenzaron a poblarlo todo. Sin embargo, las pocas flores supervivientes se marchitaron, y se tornaron grises, marrones o rojizas, con una textura parecida a la ceniza, que al tocarla, se deshacen, pero al día siguiente nacen de nuevo como si nada hubiera ocurrido. El paraje desértico no cuenta con embalses acuáticos, y de vez en cuando sopla un viento caliente y seco. No es un feudo muy visitado por los nobles, incómodos con su aspecto, pero encierra una belleza etérea, como si estuviese anclado en el tiempo, que Lord Ibrahim adora.
El palacio del feudo se encuentra actualmente en construcción, el Palacio de la Tormenta de Arena. Es un palacio levantado encima del propio desierto, sobre una gran columna de piedra salvaje que se extiende en el aire caprichosamente. De varias grietas de la piedra emana arena continuamente, como si de cascadas se tratara. El único punto de acceso al palacio es una enorme escalinata levantada alrededor de la columna de piedra que sostiene el palacio al suelo. Un arco de estilo persa se levanta a la mitad de la escalinata para dar la bienvenida a los visitantes, con el escudo de la casa Beaumayn grabado en piedra. Finalmente, el palacio está construido de arena solidificada, de textura en grano. La estructura presenta un ala principal, adornada por varias torres, guardando la estética persa común en todo el edificio. Largas hiedras de ceniza cuelgan del palacio en recuerdo de su antiguo nombre.
La decoración del interior es rica en arcos de medio punto, lámparas colgantes de ámbar y alfombras de seda hiladas por Boggan. Las cortinas son de gasa, y ondean en las balconadas cuando sopla la brisa. La propia habitación de Lord Ibrahim está en la torre más alta que corona el palacio, con una cama de dosel, cojines y alfombras distribuidas aleatoriamente por el suelo, y una enorme balconada, con una balustrada de mármol ocre, una fuente que emana arena en el centro, un parasol, y un banco donde el anfitrión se sienta asiduamente a leer sus antiguos tomos.
(by Mindersh)