Partida Rol por web

Evonne suspiró y se acercó a él. Alzó las manos para coger las suyas y descubrirle el rostro. Sus ojos estaban nublados.

-No eres como él, Morgan... Nunca lo has sido y nunca lo serás. Era un hechizo, y no voy a permitir que vuelvan a hacerlo, te lo prometo...

Le acarició la mejilla con los dedos, cubriendo la cicatriz que ahora lucía.

Morgan buscó su mano con los labios y depositó un beso en su palma. Estaba llorando. Saber que había sido obligado a estar con la mujer que amaba con el disfraz del hombre al que amaba ella debía de ser duro. Y no recordarlo, aún más. El Eiluned la miró con ojos turbios y extendió la mano para tocar la mejilla de ella.

-Mi amor... -Buscó su abrazo y la estrechó con fuerza-. Creía que siendo Eiluned conocería algo sobre la magia, pero... De lo único que me sirve es para perder mi tiempo en el bosque. Y lo que ello conlleva... Así que cada vez que cerraba los ojos y me despertaba en otro lugar había pasado la noche con Axelle... Es extraño...

La vidente, que al contrario que él sí había visto aquello con sus propios ojos (aunque no en demasiada profundidad), hizo esfuerzos por mantenerse serena cuando él se derrumbó. Rodeó su cintura con los brazos y apoyó la mejilla en su pecho. Apretaba la mandíbula mientras una maraña de celos luchaba por asomar. Pero no, él no tenía la culpa y lo que le habían hecho era imperdonable.

-No pienses en ello, no de esa manera -dijo finalmente, en tono suave. Se puso de puntillas para alcanzar sus labios-. Es complicado conocer los infinitos usos de la magia que poseemos, y este Condado está infestado de malas intenciones. Pero, ¿recuerdas lo que hablábamos en la boda? Era hermoso y esperanzador ver amor verdadero, y me hablaste de compartir la pasión con una sola persona.

Le miró profundamente.

Sé que esto ha nacido de ti y de mí, sin ningún tipo de intervención. Y voy a permanecer a tu lado para que nada interfiera en ello. Quiero que seas plenamente consciente y dueño de tus actos, como todo el mundo debería serlo siempre.

-No perdonaré ni lo que te han hecho a ti ni lo que me han hecho a mí -dijo Morgan-. Y si es cierto que ha sido culpa de Axelle, entonces... -Su semblante se oscureció-. Entonces tendré que vengarme por ambos. Pero debes saber que no me quedaré de brazos cruzados, Evonne. Me importas demasiado.

-Lo sé, pero el tiempo me ha enseñado a hacer las cosas con calma. Dejarse llevar por la ira sólo logrará que otros que no tienen la culpa acaben malheridos. Tal y como ha hecho Marion. Pero no voy a dejar esta cuenta sin saldar, eso seguro...

Cuando el rostro de Morgan se ensombrecía, o cuando mostraba su lado más Eiluned, parecía un hombre totalmente diferente. No le desagradaba, le gustaba ese tipo de determinación, pero moderada y con pensamientos fríos.