Partida Rol por web

 Espera a que me ponga de espaldas, las cicatrices son tan sexys que las clientas se abalanzarían sobre mí - bromea mientras se viste.

Una vez vestido se acerca para besarte de nuevo.

 Vamos a ver si están preparando la cena. Pensaba hacer tiempo aquí, pero con cierta visita inoportuna...

 ¡He dicho que lo siento, jo! - exclama Claire desde fuera.

Cuando salís de la habitación veis a Claire roja como un tomate, y con cara de tensión, sosteniendo un libro en sus manos.

 Perdonad lo de antes, es que Natasha me dijo que fuisteis corriendo a la habitación y quería ver si estabais bien. También me dijo que te diera esto - te ofrece el libro - Dijo que se lo había comprado a Ian pero resulta que él ya lo tiene.

Coges el libro y lo miras. "El arte del combate de Alakatar Maetyl", de autor anónimo.

 He oído hablar del libro, tengo entendido que está siendo un exitazo de ventas, muy populares entre guerreros y soldados. Tengo una copia por ahí, pero aún no he empezado a leerlo...

Ouh- parecía lamentar la interrupción. 

Cojo el libro y lo miro con interés antes de mirar a Clare con una media sonrisa pícara -¿le compraste tú el que ya tiene?- se notaba que hablaba con un toque de broma, aunque no descartaba dicha idea. 

Vaya... es curioso que no se sepa quién es el autor... ¿¿de verdad me lo puedo quedar??- puede que encontrase algo de utilidad para las peleas. 

 Tengo una copia por ahí, pero aún no he empezado a leerlo...

Eres un vago- digo mirándolo medianamente mal antes de empezar a reír.  

 ¡No, no! Se lo compró Natasha a su hermano. Y claro que puedes quedártelo. Es más, yo ya tengo otra copia, podríamos comentar sobre el libro cuando lo leamos. ¿Qué te parece? - propone ilusionada enseñando otra copia del libro - Y tú léetelo, Irvine.

 ¿Ack? ¡Vale, vale, me lo leeré! Ehm... ¿bajamos a ver cómo anda la cena?

 Claro, Adlan vino con esa camarera de la heladería, dijo que iba a probarla en la cocina.

 ¿Qué camare...? Espera, ¿es aquella que se puso a llorar cuando la despidieron?

Decía el que ya tenía él- le digo con un ligero codazo. Pero prefería dejar el tema, no quería molestarla. 

¿La chica de pelo rosa?- recordaba haber intentado ayudarla, y todavía intentaba recordar cómo se llamaba -¿y por qué la ha traído aquí? 

Mientras hablaba seguía el camino hacia la cocina. Aunque, como era esperar para alguien sin sentido de la orientación, tomé el camino contrario... hasta que Claire me avisó. 

 No lo sé, pero Adlan dijo que iba a preparar ella la cena. ¿Cómo se llamaba? ¿Karen, Penny...? ¡Ah, sí, Kathy!

 Pues espero que no cocine igual que sirve los platos, la verdad... para qué voy a engañaros, ahora me comería hasta una bota vieja.

 ¡Jajajaja! Bueno, Anko, tú que... ¡Anko, que es por aquí! - te advierte cuando ve que te despistas. Cuando regresas con ella escuchas un estruendo, como si varias cosas metálicas se hubieran caído en un pasillo lejos de vuestro camino - Agh... otra vez se ha caído esa dichosa armadura. Ni caso.

Estáis a punto de llegar a la planta inferior.

Al oír el estruendo los pelos se me erizan y me lanzo a los brazos de Irvine para que me coja. ¡Creía que eran fantasmas!

¿¿Tenéis una armadura encantada?? Eso lo debería de ver alguien...- vuelvo a bajar como si no hubiera pasado nada -confío en que si la han dejado en las cocinas es porque confía ... ¡sino también dejaría que cocinase Dayla! jajajajaja

 No, es la armadura del fundador del gremio. A la mínima se cae del soporte y arma un escándalo tremendo.

En cuanto llegas a la planta inferior te golpea en el olfato un olor delicioso. Huele a... ¡estofado de faisán!

Irvine babea abundantemente en cuanto percibe el olor.

 Uuuuhm... qué hambre...