De entre las sombras aparece Arkan, miembro con el cual no he hablado demasiado, y nos cuenta lo sucedido con el campo de esclavos... Pobre chica, lo que ha tenido que pasar allí. Intentaré animarla sin atosigarla demasiado.
Nos ponemos de camino de nuevo al gremio. Bien, ¡otro encargo completado con éxito! La verdad es que agradezco la compañía que he tenido, si no es por la chica gato y Dante no sé si habría tenido el valor de meterme a la cueva... De todas formas, con éste último se me hace aún bastante incómodo el entablar palabra, ya que me viene a la mente lo sucedido poco antes de que despertara del todo y mi cara se convierte en todo un espectáculo digno de ver.
Me acerco a la chica sin pegarme demasiado -bien, ¿y cómo dices que te llamas? Sé que sabrás mi nombre, pero después de lo que ha pasado hasta ahora creo que es mejor presentarme bien... Me llamo Anko, ¡espero que seamos amigas!- digo esto último con una amplia sonrisa.
Cuando llegamos ha la casa del cazador me alegro de que se lo tomara tan bien el regalo y el saber que tenia unos vecinos tan juerguistas, sabia que iba a estar bien a partir de ahora, así que no me preocupe cuando dijo que ellos me cuidaran, ya e comprobado de buena mano que no me harán nada malo y que se preocupan por mi...hasta aquel momento nunca sentí eso, y me resulta aun tan...extraño. Todo lo que ha ocurrido en mi vida, el giro tan inesperado, hace dos días estaba aun en aquel horrible lugar pensando en que me harían esos terribles seres con mi cuerpo, y hoy e conocido miles de cosas nuevas y de sensaciones realmente conmovedoras, al fin...al fin me siento libre. Empezaron a charlar sobre mi situación, y lo que tuve que pasar. Me sorprende que aunque no les haya contado nada, ya sepan tanto sobre mi, eso me llevo a recordar ciertas imágenes demasiado recientes y a avergonzarme por mi traumatico pasado. Por suerte Anko me saco de esos pensamientos tan oscuros.
-Mi nombre es 143, encantada.
La palabra amigas, me era muy difícil de comprender, pero supongo que significaría algo como socios, o camaradas, o aliados...ya lo descubriría con el tiempo.
Mientras mi mente estaba perdida en esos pensamientos vi como mientras charlaban todos tranquilamente, una sombra que me heló la sangre se ponía cerca...muy cerca de nosotros, su ropa estaba echa girones y sus ojos se clavaban en los míos con un odio e ira que hizo que me quedara muda, un drow me estaba amenazando de muerte con la mirada, un drow estaba dispuesto a matarme con una gran bola de fuego, y yo solo podía quedarme ahí paralizada por el terror, muda, y con la mirada fija en esos ojos. Y otro drow aparece, ya esta este es mi final, matame o llévame a mi infierno, pero no les hagas nada a ellos. Para mi sorpresa, el drow que llego clavo dos espadas en la espalda del drow que quería asesinarme. Debería haberme dado cuenta de que tenia el emblema del gremio, debería haberme dado cuenta de que me había salvado a mi y a todos la vida, debería haberme dado cuenta de que sonreía y charlaba amigablemente con dante, peor no podía oír, ni moverme, solo conseguí articular lo que pensé antes con la cara pálida y temblando como una hoja incapaz de pensar.
-Matame o llévame a mi infierno, pero no les hagas nada a ellos por favor.
-¡Oh nononononooo! Tranquila... ¿163?- mierda, no me acuerdo del número exacto que me ha dicho -aunque sea un drow nunca nos haría daño, es un amigo nuestro, nos protege como has visto...- hablo despacio pero con la voz clara para que me entienda.
Aún le sigo dando vueltas a la cabeza sobre todos los recuerdos que me vinieron de historias de mi niñez, después de todo... eran sólo historias, antes de hacer ninguna pregunta tengo que intentar que la chica se encuentre a gusto entre nosotros y con la confianza suficiente.
Arkan sigue manteniendo la distancia con respecto a Ayame. Es consciente de que le tiene pánico.
No tengo motivos para hacerte daño, ni pienso hacértelo. No soy como ellos. Es más, en su día fui perseguido como tú, y aún me persiguen. Querían convertirme en el esclavo personal de la emperatriz de las sombras.
Dante se gira sorprendido.
¿En serio?
El drow asiente con la cabeza.
Sí. Al principio me querían muerto por ser el primogénito de la anterior emperatriz, pero parece que la actual se ha encaprichado conmigo. Y también anda detrás de los poderes premonitorios de mi hermana.
Seguís avanzando hasta salir del bosque y llegar... ¡al lado del Monasterio de los Monjes Cerveceros! Dante se aparta a un lado, se apoya en un árbol y vomita.
¡No beberé cerveza nunca más! - aseguró.
Eso dicen todos los que recaen - contesta con una sonrisa divertida al ver a Dante tan tocado - ¡Je! Me recuerdas a Nizel.
Os subís a un carruaje rumbo a Pelidia. Dante y Anko están cara a cara, y Arkan se puso en el lado opuesto a Ayame para no incomodarla.
Al llegar a la ciudad, pudisteis distinguir una columna de humo procedente del centro de la ciudad y que asciende hasta el cielo.
¿Qué diablos...? No... ¡¡¡EL HUMO PROCEDE DEL GREMIO!!!
(Editado, os dejo interactuar antes de cerrar la escena)
Ahora comienzo a analizar todo lo que a ocurrido, mi mente va a pasos de tortuga, y el resacon que llevo encima no ayuda a que aclare mis ideas, pero veo como el drow no pretende hacerme daño, incluso nos ha...¿salvado? y Anko intenta explicarme que es del gremio, pero por mucho que me diga no puedo fiarme de el, no puedo borrar de mi mente mi pasado, no tan pronto.
-No...¿daño?, ¿amigo?, ¿proteger?.
Miro a los ojos de la chica, y por lo que veo en su cara, mi rostro refleja todo el miedo y la desesperación que siente mi corazón. No paraba de temblar como una hoja y por un momento sentia como mis ojos se estaban humedeciendo.
-No me llevara alli ¿verdad? ¿me lo prometes?
Tras todo lo ocurrido,me despido de Alexander prometiendole que algún día lo visitare, si no me pierdo antes y sigo al grupo, lo máximo alejada posible del drow.
Un dorw ¿esclavo?
Dante vomita en un árbol, recordándome las consecuencias de la bebida mágica.
Al menos a mi no me ha echo ese efecto...de momento.
Nos subimos a un carruaje. No se donde vamos, pero tampoco estoy preocupada por eso ahora mismo, sigo con el terror en el cuerpo y no se porque me ha querido atacar aquel drow de esa manera. Iba a preguntar en voz alta pero justo en ese momento veo como una columna de humo parece a lo lejos y el drow grita que el humo sale del gremio
-¿Eso es algo normal?
Le pregunto a Anko
Dante tiene los ojos clavados en la columna de humo, muy afectado.
No... otra vez no... esto ya pasó con la orden de la Maza Brillante... antes de ser destruida... están... atacando al gremio... - dice, completamente pálido y con dificultades para articular la frase.
¡Y una mierda voy a permitirlo! - antes de que pudierais hacer nada Arkan desaparece ante vuestros ojos.
Ahora sí, concluyo la escena. Esperad al siguiente post