Partida Rol por web

 En ese caso está decidido. Respecto al vestido... por el momento el mío me lo quedaré, que tengo algo en mente. Pero primero quiero quitármelo cuanto antes. Freya, ¿me ayudas?

 Va a ser lo mejor. Conociéndote lo destrozarías.

 ¡Eh! ¡Que no soy una simple bruta! Sé cómo tratar los vestidos delicados, aunque nunca los use. Con permiso, Jendry.

Cassandra y Freya se ausentan varios minutos yendo a otro camerino, y al regresar ves que vuelven a llevar sus armaduras. Los vestidos los han guardado en una bolsa.

 Ya está, vamos a comer.

Abandonáis el teatro y vais a un restaurante cercano, de lujo. Cassandra habla con el camarero y este os lleva a una mesa. El camarero os informa de que la famosa chef Nirandhel va a preparar sus platos más conocidos: fideuá de pato y setas con especias élficas, ensalada de hierbas del bosque y su postre estrella, la Tarta Arboleda.

Has oído hablar de Nirandhel, una increíblemente talentosa cocinera elfa, considerada una de las mejores del mundo. También sabes que tiene una aprendiz originaria de Pelidia, salida de los fogones de un asador familiar.

Echas un vistazo a la carta y te echas a temblar con los precios... ¡el plato más barato cuesta 15 piezas de oro! ¡Y por el fideuá piden 100! ¡E incluso cobran por un vaso de agua!

Jendry esperó pacientemente a que Freya y Cassandra se cambiasen de atuendo y se volvieran a poner las armaduras. Al cabo se un corto rato volvieron.

Jendry se dejo guiar por la ciudad por sus dos compañeras. Estas le llevaron a un restaurante. "¿¿Vamos comer aquí??" Pensó, alarmado, al ver el lujoso restaurante. Al parecer si iban a comer allí. Entraron. Un camarero les llevó a una mesa y les dejó la carta. El camarero les informó de que Nirandhel, una famosa chef, estaba ese día en las cocinas. Jendry había escuchado hablar de ella, en un principió se alegro, iba a comer algo delicioso. Sin embargo, en cuanto abrió la carta y vio los precios... Su alegria se esfumó. El menú del día costaba 100 MO, eso sin incluir la bebida, que por cierto, había que pagar hasta por el agua. En ese momento Jendry deseó por unos segundos seguir siendo aquel asesino que hasta hace algun tiempo habia sido y cargarse a los dueños del establecimiento por tales precios. Por unos seguidos. no tardo en desechar ese deseo. Sobre todo por Cassandra. Si intentase algo, esta no tardaría nada en pararlo. Jendry bajó de las nubes y volvió a la tierra. Acababan de pagarle, por lo que tenía dinero de sobra para pagar. Echó un vistazo a la carta, buscando lo mas barato que hubiese. Una vez se decidió, llamó al camarero. -Voy a tomar esto de aquí- Le dijo Jendry señalando lo mas barato que había visto

Camarero: Por supuesto - toma nota - ¿Y qué desean las señoritas?

 Yo quisiera...

Entonces una chica de cabello moreno se acerca al camarero y murmura una cosa, antes de miraros y esbozar una sonrisa, antes de retirarse hacia la cocina.

Camarero: Señores, me acaban de notificar que la chef Nirandhel desea invitar a ustedes a probar sus platos estrella, todo lo que pidan corre a su cuenta - dice sin inmutarse.

Freya se te acerca un poco.

 Nirandhel es una amiga del chef de nuestro gremio, Berner - te explica.

Camarero: ¿Sois de Pluma de Fénix? Sois afortunados de tener a un chef de la élite como Berner.

¿Están insinuando que el gremio tiene a un super-chef en su cocina? Pero hay una cosa más importante... ¡la cena es gratis!

"Je... jejejejejejejejejejejejejeje" Jendry se reía mentalmente. Mientras, una sonrisa se dibujaba en su cara. -Camarero- Lo llamó de nuevo -Quisiera cambiar mi pedido. Quiero el menú del dia. Ademas de...- Jendry señalo en la carta tres platos mas que le parecían deliciosos.

Una vez habían pedido todos Jendry miró a Cassandra y Freya -Así que... el gremio tiene un superchef. Que bueno es saberlo- Les dijo sonriente. Así, Jendry dejo bastante claro lo glotón que era.

Jendry esperaba sentado, alegremente que le trajeran la comida.

Camarero: De acuerdo, tomo nota... ahora mismo traslado el pedido.

El camarero se retira tras tomar nota de todos vuestros pedidos.

 Sí, comemos de lujo. Sabe hacer de todo, no es como esos chefs estirados que hacen platitos que no llenan nada, ésos son unos estafadores...

 Freya, es que son platos para degustar, no para comer. Allí se va a saborear.

 Eso me decían mis padres y mis hermanos, pero es que yo no lo entiendo, jopé... Por cierto, Cassie. ¿Qué vas a hacer con ese vestido, si no te gusta?

 Aguarda y espera, Freya - afirma girándose hacia la izquierda, viendo cómo un par de personas se acercan a la mesa.

Tipo: Buenos días. Disculpe, ese vestido... ¿es el de princesa de Lady Vaga?

 Así es. Iba a buscar un comprador tras la cena.

Tipo: ¡No hace falta que busque más, le ofrezco 200 de oro!

Tipo2: ¡No le escuche, le ofrezco 300!

Tipo: ¡400!

Mujer de otra mesa: ¡500!

Muchos comensales empezaron a pujar como locos por el vestido, subiendo la puja como la espuma. ¡Vaya subasta improvisada se ha montado en un momento! Cassandra acabó vendiéndoselo a un hombre de negocios -que lo quería para su hija- por más de 5.000 de oro. ¡Fue una locura!

 Caramba... yo el mío no lo pienso vender - murmura con temor a que descubran que tiene otro.

 Entonces guárdalo bien y no lo menciones - sugiere la guerrera, quien guarda todo el oro en una bolsa mágica.

El camarero empieza a traer los aperitivos, un par de botellas de vino de cosecha y algunos de los pedidos.

Jendfry esperaba la comida. Mientras Cassandra y Freya hablaban sobre los restaurantes gourmet, esos que te ponen poca comida por mucho dinero. "Meh, que se vayan allí los ricos estúpidos" Pensaba. Jendry prefería comida de peor calidad o mas simple, pero en mayor cantidad.

En ese momento salio a la luz el tema del vestido. En seguida se empezaron a acercar interesado y se formó una subasta improvisada. Jendry estaba impresionado. Tanta gente pagando tanto por un vestido incomodo y molesto. Aunque por otro lado lamentaba haber dejado el suyo en el teatro. -Tch- chasqueó la lengua. "Tendria que habérmelo quedado" Pensó.

Llegaron entonces el vino y los aperitivos. Miró el vino con mala cara, como si este fuera un enemigo mortal. Luego centró su atención en los aperitivos. Eso si le gustaba. Sin perder tiempo empezó a comer con ganas, al fin y al cabo estaba hambriento. Eso si, con algo de delicadeza y modales. No había olvidado que estaba en un restaurante de lujo.

Cuando estabais a punto de terminar con los aperitivos empiezan a traeros los platos principales, empezando por la ensalada de hierbas del bosque.

Tras revolver un poco tu plato de ensalada para mezclar bien el aceite lo pruebas. ¡Está increíble! Jamás habías probado algo así en tu vida. Miras a tus compañeras, quienes no parecen tan sorprendidas.

 Es un estilo diferente al de Berner, pero también está riquísimo.

 Claro, ambos son los mejores chefs del mundo - afirma la rubia, quien es la que actúa de forma más fría. Te preguntas si le está gustando el plato cuando ves que se ruboriza un poco al probar otro bocado.

Después llegó el fideuá de pato, también impresionante. Pero tus compañeras no estaban de acuerdo, preferían el asado de pato a la coblercon (¿en serio, piedras?, te preguntas) con guarnición de ensalada élfica de Berner.

Tras traerte todo lo que pediste, llega la Tarta Arboleda, una tarta de chocolate y nata con glaseado, con varias figuras comestibles que forman una arboleda. Entonces una elfa pelirroja de gran belleza se acerca a vuestra mesa con un cuchillo pastelero y divide la tarta en varias partes antes de servirlo en sendos platos.

 Espero que os guste mi tarta.

Los 3 dais un bocado al pastel. Sencillamente sublime, un sabor dulce y delicado, con el bizcocho de la tarta esponjoso que se deshace en la boca. Aquello fue una orgía de sabor. Y tus compañeras actuando como si fuese lo más normal del mundo...

 Está delicioso - afirma la guerrera.

Jendry disfrutaba y saboreaba cada bocado de comida. Era deliciosa. Estaba absorto en los sabores. Nunca antes había probado comida tan deliciosa. Podía oír a Cassandra y a Freya contrastar la comida con la del cocinero del gremio, Berner, sin embargo no les prestó mucha atención.

Después llegó el postre, una deliciosa tarta. Jendry le dio un bocado pequeño primero, luego empezó a dar bocados mas grandes. Apenas le quedaba ya tarta cuando una chica pelirroja se acercó preguntando si les gustaba la tarta. Jendry la miró, con la boca llena y algunas boceras y asintió con la cabeza a la vez que hacia un ruido parecido a "Si" Sin abrir la boca. 

Se comió el trozo por completo y se limpió -Estaba deliciosa- le dijo a la chica. Se fijó en que hablaban con total naturalidad -¿Os conocéis?- les preguntó

 Jendry, ella es Nirandhel, la chef - miras un momento a la elfa - La conocemos de cuando viene a visitar a Berner, son muy buenos amigos. E incluso alguna vez han cocinado juntos para el gremio.

 Muy cierto. Solemos hablar de cómo nos va, qué platos nuevos hemos innovado y nos intercambiamos recetas y consejos. Además hace poco he conocido a su aprendiz.

 ¡Ah, sí, Adlan! Es muy majo, y le salen unos postres increíbles.

 Sí. Y hace un par de días ganó aquí un concurso de cocina, haciendo equipo con mi aprendiz.

 ¿Así que al final pudo participar? No hacía más que hablar de ello, y se deprimía al no tener a nadie con quien formar equipo. Imagino que formarían un equipo imbatible.

 Pues vuestra compañera Anko e Irvine se lo pusieron muy difícil. Incluso el soldadito pescó al legendario General Norman, la carpa dorada gigante.

 ¿Era real esa historia de pescadores? Vaya...

Nirandhel esboza una sonrisa.

 Yo también me sorprendí bastante. De hecho creo que el único que no se sorprendió fue Adlan. Pero bueno, Catherine y Adlan ganaron la competición y Anko e Irvine quedaron segundos. Toda una hazaña para unos cocineros amateurs - Nirandhel se gira para ver cómo la chica morena de antes le hace señas - Mi aprendiz me reclama. Ha sido un placer hablar un rato con vosotros, y me alegro de que os gusten mis platos. Que disfruten la velada.

Nirandhel se despide educadamente y se retira hacia la cocina.

 ¡Ufff! ¡La cena ha estado genial!

Así que, esa chica era Nirandhel. La chef encargada de esa deliciosa comida. "Que suerte tienen en este gremio" Pensó. Entre Berner y las visitas ocasionales de Nirandhel, no cabía la menor duda de que Jendry iba a estar, por lo menos, bien alimentado. 

Escuchó atentamente la conversación que esta y sus dos compañeras tenían. Hablaron sobre un concurso de cocina. Al parecer participaron dos miembros del gremio, y no quedaron en mala posición. Después de la charla, la chef se retiró a su cocina. 

Freya expresó lo bien que le había sentado la comida. -Si, nunca había comido tan bien- Le respondió Jendry. Lo triste es que no mentía, el jamas había comido algo tan bueno. Tristeza que se reflejó levemente en su cara. Afortunadamente no duró mucho esa mueca. -¿Que tenéis pensado hacer?- Les preguntó. -Yo iré a hacer algo de ejercicio- añadió.

 Nosotras regresaremos al gremio. Tengo que hacer mantenimiento a mi equipo y no vendría mal un poco de descanso - responde - Si planeas hacer ejercicio, podrías hacerlo en la playa al lado de la sede, es un buen lugar para ello.

 ¡También es ideal para tomar el sol y broncearse! - salta Freya, con sus propios temas.

Acabas de darte cuenta de un detalle: Deekin no está por aquí. Desde luego no entró en el restaurante y, de hecho, la última vez que lo viste fue en el teatro.

-Está bien- Les contestó a Cassandra y Freya. Entrenar en la arena de la playa sería doblemente beneficioso. Por un lado sería mas duro, lo que se traduce en mayor beneficio. Por otro se broncearía un poco, que por todos los años en su anterior gremio, estaba bastante paliducho.

En ese momento reparó en la ausencia de Deekin. Miró a un lado y al otro y no lo vio. -¿Donde esta Deekin?- les preguntó a sus compañeras.

 ¡Es verdad, nos hemos olvidado de él! Bueno, seguro que sabe cuidarse solo.

 ¿En serio piensas eso? Bran suele quejarse mucho de las veces en el que ese pequeño bardo se mete en líos. Vamos a ir a buscarle. Jendry, tú regresa al gremio, nosotras nos encargaremos de ello.

Cassandra toma el mando de la situación y se prepara para ir a buscar a Deekin con Freya. Te despides de ellas antes de abandonar el restaurante.

En el camino de regreso ves salir de un callejón a toda velocidad a 3 hombres (2 de ellos llevándose a rastras al tercero, a quien apenas se le ve la cara por su sombrero y forcejeando para que le suelten, cuchillo en mano), perseguidos por un anciano furibundo armado con un bastón. Tras el anciano aparece un tipo grandote con armadura.

^{(El viejo no tiene avatar)}

Anciano: ¡Malditos, me habéis destruido mi tienda!

 ¡SOLTADME, CABRONES! ¡QUIERO CALCINAR TAMBIÉN AL VIEJO CASCARRABIAS!

 ¡Ni loco! ¡Lo último que quiero es tener que dar explicaciones a la guardia!

Los 3 desaparecen en un callejón, dejando tras de sí un saco que se les cayó. El viejo se detiene, mira la bolsa y ve que está cargado de oro.

Anciano: Hum... esto pagará las reparaciones de mi tienda - se gira hacia el otro tipo - No sé cómo puedes viajar con semejante gentuza, muchacho, pareces buena gente.

 En realidad son buena gente, señor viejo. Estoy seguro de que todo fue un accidente, a mi amigo Dorian le encanta usar magia y a veces se descontrola. Ah, y gracias por enseñarme las espadas, me encantan las espadas y las armaduras... - mira hacia el callejón - ¡Ah, que los pierdo! ¡Nos vemos en otra ocasión! ¡CHICOS, ESPERADME!

A lo lejos se escucha gritar al psicópata del cuchillo.

 ¡Corred más rápido, igual perdemos al bobalicón de la armadura!

Y finalmente la calle vuelve a la calma, una vez el tipo rubio de la armadura fue corriendo tras sus "amigos" y el viejo se retira con el saco de oro.

Jendry observó la situación. Dos tíos arrastrando a otro que quería carbonizar a alguien. Un viejo persiguiéndoles y otro tío hablando con el viejo. Este se encontró una bolsa con oro, perteneciente a esos tios. Al parecer, por accidente, le habían quemado la tienda.

Una vez se "soluciono" el entuerto, Jendry tenía curiosidad sobre el viejo. Su tienda estaba destrozada, y el probablemente no podría arreglarla por si mismo. Jendry decidió seguir al viejo y ver si podría ayudarle con algo.

Sigues al anciano por las calles, hasta llegar a un edificio totalmente arrasado. ¡Menuda salvajada, no han quedado sanos ni los cimientos! ¿Pero qué clase de ser ha hecho esto?

Cuando quieres darte cuenta el anciano ya te está mirando, con suspicacia.

Anciano: ¿Qué quieres, jovencito?

Jendry, después de seguir al anciano por las calles de la ciudad, llegó finalmente a su tienda, o mejor dicho, a lo que quedaba de ella. El anciano se percató de su presencia y preguntó que que quería. -Vi lo que pasó hace unos minutos lo que pasó con esos tíos, los que te quemaron la tienda y pensé que si tienes que arreglarla, te iría bien un poco de ayuda- Le respondió Jendry al anciano, en tono serio y amable.

El anciano se ríe al escucharte.

Anciano: Oh, no, jovencito - te enseña la bolsa de oro - Con esto pagaré de sobra una reconstrucción en condiciones. ¡Hasta podré hacer ampliaciones! Agradezco el detalle, jovencito, pero no necesito ninguna ayuda. Solo tengo que hablar con un amigo arquitecto, pero ya lo haré en su debido momento.

Parece ser que has venido en balde. El anciano no necesita ninguna ayuda.

Jendry escuchó la respuesta del anciano. "Ouh.." -Vale, me quedo mas tranquilo- Le respondió Jendry a el. Una vez dicho esto, Jendry se dio la vuelta y marcharse dirección al gremio a hacer ejercicio y entrenar un poco