Partida Rol por web

 Claro, de hecho el vaso era para ti. Te vi pasar y parecías sedienta - te entrega el vaso, el cual bebes rápidamente - Pues yo he dormido plácidamente. Hacía mucho que no dormía con tranquilidad, sin tener que estar pendiente de cuándo mi señor iba a meterse en mi lecho.

No quieres ni imaginar en lo que habrá pasado esta muchacha en manos del barón durante tanto tiempo. Os dirigís al comedor, donde veis sobre la mesa al Señor Bigotitos, repantigado. Ya habías olvidado que el gato vino de "paquete" bajo las faldas de Erika.

 Miau - maúlla alegremente.

Pronto aparecen Mark y Akane, y vuestros compañeros sirven el desayuno y se sientan para acompañar. Tortitas con un tazón de chocolate caliente que desprendía un olor delicioso, mientras el Señor Bigotitos engullía un plato de salmón ahumado.

Una vez acabado el desayuno Mark se acerca a vosotras.

 Ahora iréis a Diente de Hidra, ¿verdad? Alguien vendrá para acompañaros hasta la sede.

Justo lo comentan y llaman a la puerta. Una de las empleadas va a abrir a la puerta y poco después regresa acompañada por Glenn, el encapuchado enmascarado de anoche que no habla. En cuanto llega al comedor escribe en su cuaderno un gran "BUENOS DÍAS".

El vaso de agua había entrado solo de un trago, y el desayuno había sido espectacular. Me gustaba la forma que tenía "el tío Mark" de tratar a sus empleados. Era un tío legal. 

Hablábamos de cosas banales mientras comíamos, demasiado ocupados saboreando los alimentos como para tan siquiera pensar en una buena conversación (por lo menos en mi caso). 

-Sí, claro. Cuanto antes vayamos antes llegaremos. ¡Quiero volver a ponerme las pilas con los encargos! Y quizás la papiroflexia de las servilletas me sirva para alguno de ellos jajajajaja ... Buenos diaaaaaaaaaaaaaaaas ~

Levanto la mano en alto con una gran sonrisa hacia el tipo de la máscara. Como siempre con su libreta para escribir lo que quiere decir -¿tú nos vas a acompañar? ¡Bien! En ese caso no tardemos- me pongo en pie tendiendo la mano a Erika -¿tienes algo que tengas que recoger todavía?- tenía bastantes ganas de ver a los miembros del gremio, no podía negarlo, y se notaba en cada célula de mi piel que temblaba de emoción -si no es así... ¡EN MARCHA!- llena de energía como siempre me giro hacia lord Byron con una espléndida sonrisa -tío Mark, gracias por todo lo que has hecho por nosotros. ¡Deja en mi mano lo que me encargaste!- apoyo las palabras con un golpe de puño en el pecho cargada de confianza -¡Volveremos a vernos pronto!

Antes de que dijeran nada ya estaba lista para marcharnos, bastante impaciente. 

Y así es como Anko regresa a la sede Diente de Hidra, acompañada por Erika y el misterioso Glenn